La sensación de pánico no se iba, mi cabeza aún no lograba tener paz y yo sentía que el mundo me daba vueltas, no sabia si la razón era el licor que había ingerido hasta el momento o su presencia.
Le dije a mi amiga que no me sentía bien y que quería ir al baño a lo que ella accedió acompañarme. Para llegar al baño debía pasar cerca a su mesa, no muy cerca como para incomodarlo, pero tampoco muy lejos como para que me ignorara, aun así, quisiera o no debía ir al baño, mi estado de pánico solo empeoraba.
Camino al baño y en el punto del recorrido más cercano a él, noté como cambiaba el ambiente, un poco más tenso para mí debido a que todo mi cuerpo y mi corazón solo querían estar en el lugar al que pertenecen, a su lado.
Estando en el baño, y debido al cambio de luz, el cambio del volumen e incluso haber salido de ese ambiente excitado y curioso del recinto me hizo sentir mejor. Me vi al espejo, abrí la llave y deje caer el agua sobre mis manos mientras respiraba cada vez más profundo, dejando relajar mi cuerpo y notando lo tensa que había sido la última hora y media desde que mi destino había cruzado el umbral.
No sé cuanto tiempo pasó mientras estuve dentro del tocador de damas, sin embargo no podía ignorar el ruido que venía de afuera justo en la entrada compartida que tenían los baños de las chicas y los chicos. Al parecer, Baekhyun se encontraba en el baño de los caballeros, motivo por el cual decidí no salir y esperar a que tanto él como el ejército de personas que esperaban en la puerta se fueran.
Cuando todos se habían ido, mi amiga, astuta y traviesa me sugiere que entremos al baño de los chicos, aun me pregunto que intentaba buscar. Luego de negarme varias veces y notar que ella no se daría por vencida, accedí a entrar con ella.
El baño se veía limpio, higiénico y muy parecido al de las chicas, a excepción de algo. Justo en el tocador se encontraba un teléfono celular
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NOS AMAMOS EN OTRA VIDA
FanfictionElla se enamoró perdidamente de una estrella, tan real para sentirlo, tan lejano para ser imposible.