Hot and Cold

I.

Eran las 8 AM cuando Taehyung se presentó en la mansión Jung. Observaba la gran distancia entre el portón principal y la mansión,  sonrió al imaginar los paseos que daría con sus chicos, no los conocía, pero el haber escuchado la historia de esa familia le había hecho quererlos de inmediato.
El chófer de la familia le sonreía y él siendo tan alegre y cálido le respondía.

—¡Es inmenso!

— Si y la mansión es enorme, solo para tres personas.

— Deben sentirse solos.

— Puede ser.

Al llegar a la entrada de la mansión la puerta fue abierta por una señora de unos 55 años, muy amable y elegante. Lo condujo hasta la sala donde lo hizo tomar asiento ofreciéndole un refresco.

—Bien, joven Kim Taehyung. ¿Verdad?

—El mismo es todo un placer estar aquí, —dijo con una sonrisa— espero pueda cumplir con sus expectativas.

—Eres tan dulce, tus calificaciones fueron excelentes, pero ¿Por qué quieres ser institutriz?

—Bueno, me llamó la atención la descripción de los chicos y más que una institutriz requieren de mis servicios, no sé mi amistad.

La señora sonrió y asintió. — Estás contratado ¿has traído tus pertenencias?

— Sí.

—Bien ¡Sígueme!

Lo condujo a una habitación muy bonita con acceso al jardín, Taehyung se emocionó, jamás había tenido una habitación tan hermosa observó todo con la curiosidad que lo caracterizaba y no dejaba de sonreír.

—Solo una advertencia. —dijo, Taehyung se detuvo y la observó— Todos los asuntos son con mi persona, jamás, nunca te acerques a la oficina del señor Jung, a él no le gusta socializar o ser interrumpido. La disciplina debe ser excelente o él se molestará, tienes toda la mansión excepto el ala este.

Taehyung asintió y sonrió.
—¿Cómo debo dirigirme a usted?

— Solo dime Nana, joven Taehyung.

—Dime Tae como los amigos.

—A las tres llegan los niños para que les conozcas.

Taehyung se dedicó a ordenar todo en su habitación, luego se puso algo más cómodo y salió a recorrer la mansión.

(Taehyung)
Recorría la enorme mansión, jamás imaginé algo así, muchos cuadros de pinturas famosas me llamaron la atención, era hermoso ver copias exactas de Vincent Van Gogh y de Boticelli. Más adelante en la sala principal había una foto enorme familiar todos se veían sonriendo. Me acerqué para ver los rostros y ¡Santa Madre! El joven Jung era muy hermoso que perfil más perfecto, me deje llevar y con mis dedos delinee su rostro, sus ojos profundos, su hermosa sonrisa, tendría unos 17 años, quizás.

Sus padres eran muy hermosos Min Yoongi y Jung Alice al parecer por gusto del señor Min habían utilizado el apellido de la señora Jung para sus hijos.

Los mellizos eran tan bonitos ahora tenían 15 años creo son unos bebés.
No sé porqué no puedo apartar mi vista de ese hombre.

Después de curiosear por toda la mansión ví el ala este, cielos si que era inmensa la mansión y de ese lado se siente un escalofrío terrible. Sentí hambre y me dirigí a la cocina por una merienda, al llegar ví a tres sirvientas las cuales me sonrieron, se llamaban Gina, Sasha y Lena al parecer eran extranjeras. Conversamos largo rato hasta que mi curiosidad me ganó.

— ¿Es tan malo como parece?

— Bueno —dijo Gina— una vez corrió a una chica por tartamudear ante sus amigos, a otra porque se le ofreció..