Words /z.m/

Capítulo 1

Yo… Bueno, en verdad no sé por dónde empezar. Podría iniciar volviendo el tiempo atrás, exactamente tres semanas atrás cuando Clarisse anunció en la cena:

“Conseguí el billete ¡Me voy a Inglaterra!”

Y aquí, es cuando aparecen las dos reacciones que demuestran los polos opuestos que mi madre y yo somos.

“¡Felicidades!” Me levanto de mi asiento, mi madre gruñe cuando mi tenedor caer sobre mi plato abruptamente, pero no me importa y corro a abrazar a mi hermana.

“¿Por qué irte al verano europeo? Es asqueroso”  Mi madre nos mira desde el otro lado de la mesa “Además, no sé cómo cubrirás tus gastos allí, Clarisse. No estoy segura de que tan bien este viaje está planeado”

“Mamá” Clarisse arrastra las sílabas como si le estuviese teniendo paciencia “Doniya dijo que cubrirá la comida, el resto de los gastos los pagaré con mis ahorros del empleo en el acuario”

“Kayla, vuelve a comer, por favor. Tu comida se está enfriando.”

Asiento y volteo a ver a mi hermana, Clarisse sonríe triunfadoramente porque sabe que le ha cerrado la boca a mamá ¡10 puntos para Gryffindor!

El resto de la cena mamá continúa haciendo preguntas acerca del intercambio de Clarisse.

“Quiero comunicarme con los padres de Doniya antes de que te vayas. Envíales mi dirección de correo, número de teléfono y fax”

“Mamáaaa ¿Quién sigue usando el fax?” Se queja. Sus codos en la mesa y manos entre sus cabellos. Las dos comenzamos a reírnos a la vez. Pero mamá no está contenta.

“Mira Clarisse, apenas tienes 21 años y vives bajo mi techo. Esto no es un paseo a la esquina, estás cruzando el continente por primera vez y te estarás hospedando en la casa de una chica que Dios sabe en qué sitio web conociste.”  

“Lo sé” Replica Clarisse, sus ojos vagando sobre la mesa “Pero Doniya y yo hemos sido amigas por un año, conozco a toda su familia por webcam, incluso Kayla conoce a Doni”

Asiento apuntando a mi hermana con el dedo, ella tiene un punto.

“Además, si fuese una asesina en serie ¿Por qué enviaría a su hermano para tomar mi lugar aquí?” Cuestiona, encogiéndose de hombros.

Esperen ¿Qué?

“¿De qué estás hablando, Clarisse?” Pregunto confundida.

En ese momento, mamá suelta una risa amarga. Sacude la cabeza mientras se levanta de la mesa y comienza a recoger nuestros platos vacíos.

“¿No se lo has dicho a Kayla? Increíble”

Una sonrisa incómoda aparece en el rostro de mi hermana, y es allí donde me entero del pequeño detalle que Clarisse olvidó mencionar.

Su nombre era Zein, no estoy segura de cómo escribirlo pero Doniya le dijo a Clarisse que se pronunciaba como en Rain pero se escribía de forma distinta. Así que no puedo estar tan errada ¿O sí?

Eso no era lo importante después de todo. Lo importante era que, como un baldazo de agua a las tres de la mañana, mi percepción de lo que sería mi vida sin Clarisse durante los tres meses de verano cambió drásticamente.

Un día antes del vuelo, me encuentro ayudando a Clarisse a ordenar el desastre que es su habitación, después de todo, el pobre hermano de Doniya tendría que lidiar con ella.

“No es como si vayas a ser su niñera” Suspiró Clarisse. “Según Doniya, él es bastante independiente. Me dijo que…”

Un sonido proveniente de su laptop hizo que se detuviera. Sus ojos se abren y una sonrisa aparece en sus labios.

“Debe ser Doniya en Skype” Dice “¡Ven!”

Como dos niñas pequeñas nos acobijamos en la cama frente a la pantalla.

“¡Salam, Clarisse!” Doniya prácticamente grita. Lleva un moño desordenado sobre su cabeza y una enorme camiseta gris con la inscripción Bradford “¡Estoy taaaan emocionada! Literalmente robé está camiseta de mi padre para ponerte en clima ¡Dios! No sé si podré dormir esta noche”

Volteo a ver a mi hermana que cubre su boca con sus manos y deja escapar un chillido que Doniya acompaña y entonces ambas están bombeando mis oídos. Las miro y me río porque realmente estoy feliz por ellas.

“¡Kayla! Oh por Dios casi te olvido ¿Cómo estás, linda?”

“Estoy bien, aunque no tanto como ustedes, par de locas,” Le informo riendo.

“Clarisse me dijo que olvido hablarte de mi hermano” Dice juntando las cejas “¿Enserio estás bien con que él se quede contigo?”

Asiento ligeramente.

“No es molestia, Clarisse me dijo que es tranquilo”

“Sí que lo es” Doniya rueda los ojos “Él… Es muy callado ¿Sabes? Le cuesta un poco abrirse, quizá te parezca antipático pero te prometo que una vez que esté en confianza es un gran chico” Dice y su expresión se vuelve seria “Él ha pasado por algunas cosas últimamente y bueno, no se encuentra del todo bien. Por eso creí que le iría bien el cambio de aire, por supuesto que se ha resistido pero logré convencerlo” Sonríe.

“Te aseguro que está en buenas manos” Responde Clarisse pasando un brazo por mis hombros “Estoy segura de que Kayla lo hará sentir como en casa. Además, Oakland es una ciudad con una infinidad de etnias, estoy segura de que encajará” Asegura con una sonrisa.

“Es un hecho entonces” Doniya sonríe de vuelta “Lo llamaría para que lo conozcas pero se encerró en su habitación y cuando lo hace, es mejor no molestarlo” Espeta con los ojos en blanco.

“Está bien, tengo tres meses para conocerlo ¿Verdad?” Río “Las dejaré solas chicas, ya es hora de que vaya a dormir.”

Es la primera vez que no estaré junto a mi hermana mayor por tanto tiempo, así que no puedo evitar las lágrimas picando y luego estallando cuando me despido de ella en el aeropuerto. Atrapé a mi madre aplastando un pañuelo contra su ojo de forma poco delicada en cuanto Clarisse desapareció en el chequeo de equipaje, pero rápidamente se compuso caminando hacia mí.

“¿Estás lista para irte?” Dice. Su voz está un poco magullada y acabo por envolverla en mis brazos y entonces la gran Evelyn Baldwick vuelve a llorar. “Mi pequeña…” Murmura entre sollozos.

“Oh, mamá, ella estará bien. Lo sabes ¿Cierto?” Le digo con dulzura, acariciando su brazo suavemente.

Ella se separa de mí, una sonrisa sincera en su rostro.

“¡Debería ser ilegal que crezcan tan rápido! No es justo, Kayla y no lo comprenderás hasta estar en mi lugar.”

Suelto una carcajada. Mamá caprichosa es la mejor mamá.

Niego con la cabeza riendo, recordando aquel día. Que, en realidad, fue hace solo dos días. Pero es más dramático si lo digo así.