Cobarde Perdido /YoonMin/YoonKook/Taekook/

|Parte 20|

[La mala jugada]

Entro al salón presionando sus labios debido a los misteriosos nervios que de repente aparecieron en su estomago, se encontró con un Jimin parado frente al enorme espejo tratando de acomodar su cabello, noto como el menor trataba de apuntar bien con la lata de spray de color gris.

—¿necesitas ayuda? —rompió el silencio acercándose.

—hyung. —se giro nervioso bajando sus brazos.

—cierra los ojos.

Dejo que Yoongi tomara la lata y cerro los ojos como le indico, el pelinegro agito la lata y apunto para comenzar a pintar el cabello rubio del menor. Con cuidado lo esparció y coloco una de sus manos sobre los ojos de Jimin para evitar que le cayera en el rostro.

—listo, se agoto. —comento agitando la lata vacía.

Se alejo un momento para tirar a la basura aquella pequeña lata, mirando de nuevo a Jimin en el momento en que se giro hacia el espejo, el menor tocaba con cuidado su cabello ahora color gris, se podían notar claramente los enormes nervio que estaba sintiendo, pues faltaba poco para la presentación.

—te ves bien. —volvió a romper el silencio para que el contrario lo mirará. —y estoy seguro que lo harás bien.

—tengo miedo de caerme de nuevo. —confeso en un suspiro.

—eso sólo pasara si no despejas tu mente. —sin dudar un segundo tomo el rostro del menor entre sus manos. —cuando estemos en el escenario, necesito que concentres tu mente en las tonadas del piano, en sí de los instrumentos al rededor. Y quiero que sólo recuerdes un momento que te llene de tranquilidad, con toda tu atención a tu cuerpo.

Jimin asintió comenzando a sentir que sus mejillas se ponían calientes por la inesperada cercanía que tenia con el rostro de Yoongi, olfateo el aroma de un perfume masculino, y no pudo evitar mirar esos pequeños labios curiosamente rosados.

—ya entiendo hyung, pero por favor suéltame.

El pelinegro parpadeo un par de veces comprendiendo la petición del menor, lo soltó bajando la mirada aclarando su garganta sin entender porque de repente comenzó a sentir nervios.

—bueno, prepárate porque nos toca en cinco minutos.

Camino hacia el lugar donde guardaban las mochilas para tomar un poco de agua, estaba en verdad muy pensativo durante los últimos días, su confianza con Jimin se agrando mucho más, inclusive podía decir que era mucho más grande que la que tenia con Jungkook. No podía evitar compararlos aunque sabia que era malo, simplemente el rubio le daba a pensar demasiado, como si de repente sintiera algo mucho más grande que sólo amistad.

—eso seria realmente triste. —murmuro para sí mismo.

—¿dijiste algo hyung?

El pelinegro se giro de nuevo hacia el menor, dando un pequeño suspiro después de tragar el agua, se acerco un poco para darle una de las botellas.

—responde con sinceridad Jimin. —el menor asintió. —¿por qué te gusta Yoona?

—ah Yoona. —sonrió divertido. —es atractiva, baila muy bien, y quería tomar su mano.

—¿tomar su mano? —frunció el entrecejo.

—ya sabes, cuando te gusta alguien quieres tomar su mano como una muestra de afecto.

—creí que un beso era más directo.

—lo es, pero también se puede considerar como una muestra de... lujuria. —dijo comenzando a sonrojarse.