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Al despertar, hice mi rutina mañanera: Me fui a cepillar los dientes para luego ir a desayunar con mi familia.

Mi hermanito estaba platicando con emoción sobre cosas que le pasaban en la escuela y siempre me ha gustado escucharlo cuando cuanta sus divertidas anécdotas, pero esta vez me estaba concentrando tan fuerte en la cena de la tarde que no le estaba prestando atención a ninguno de los tres

— ¡Elie! — gritó mi nombre Eddie interrumpiendo mis pensamientos y haciendo que me asuste ligeramente

— ¿¡s-si!? ¿Que ocurre?

— ¡estuvimos llamándote hace dos minutos y no respondes!

Me rasqué la cabeza mientras reía nerviosamente

— lo siento, estaba pensando en algunas cosas

— ¿te gustaría contarnos lo qué pasa? — preguntó mi madre con calidez

— no es nada, solo... son los exámenes que me tienen nerviosa — respondí aún con una sonrisa nerviosa

— ¿"exámenes" es la forma que tienes de decirle a ese novio tuyo? — preguntó Eddie alzando una ceja y mirándome con una sonrisa atrevida. Sonreí y le di un pequeño empujón

— no, pequeño bobo — dije revolviéndole la cabeza a lo que él también se rió

— hablando de eso, ¿cómo están ustedes? — preguntó mi padre

— ¡b-bien! De hecho... hoy iré a cenar con él y sus padres

— ¡vaya! ¡Eso es fantástico! — comentó mi madre

— yo diría más bien aburrido — continuó mi hermano riéndose a lo que yo también me reí abrazándolo por el hombro

— cuando estés más grande verás que no es tan aburrido

— solo tienes 17, no estás tan grande

— y tú sólo tienes 12, así que no entenderás estas cosas. Tú solo concéntrate en tus videojuegos y animes

— hablando de eso, El. ¿Cuando volveremos a jugar? Me prometiste que lo harías pronto... — mencionó con un semblante decaído y automáticamente me sentí la peor hermana mayor del mundo, estaba tan preocupada por mis propios problemas que olvidé pasar tiempo con mi hermano.

— uy... lo siento mucho, Ed, lo olvidé. Pero mañana podremos jugar todo el día, ¿te parece? — pregunté sonriendo intentando alegrarle, o tal vez era un intento de alegrarme a mi misma.

— está bien...

— por ahora... — me levanté de la mesa emocionada — ¿que te parece una carrera hasta el baño principal? — pregunté con una sonrisa atrevida

— ¡acepto!

— pero, niños... — dijo mi madre pero ninguno la escuchamos

— ¡vamos! — dije y empecé a correr hacia la "meta"

— ¡ey! ¡Tramposa! — dijo mi hermano corriendo detrás de mí

Mis padres rieron al ver esto pero no sé qué ocurrió después. Eddie y yo llegamos al mismo tiempo al baño así que lo dejamos en empate

— bueno, iré a darme una ducha, avísame si me necesitas ¿vale?

Eddie asintió y se fue a su habitación y yo por mi parte me fui a la mía para hacer lo que había dicho. Me quedé en la bañera mucho más tiempo de lo pensado reflexionando sobre todo, me quedé tanto tiempo ahí que mis dedos se pusieron arrugados. Al vestirme, me quedé estudiando un poco para los exámenes y hablando un poco con Isabella hasta que finalmente fue la hora de que Jett viniera a buscarme, así que retoqué un poco mi maquillaje el cual iba a juego con mi vestido negro ajustado. Bajé las escaleras y me quedé en el sofá a esperarlo, unos minutos después, finalmente llegó y tocó mi puerta

Somos solo un ClichéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora