𝘪𝘭𝘭𝘪𝘤𝘪𝘵 𝘢𝘧𝘧𝘢𝘪𝘳𝘴 - 𝙢𝙖𝙧𝙠𝙧𝙚𝙣

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"Voy a correr" era su fiel excusa cada que sus amigos le preguntaban a dónde iba. Una vez lejos, se cubriría con la capucha y tomaría el camino menos poblado, evitando miradas curiosas con su vista baja, volvería a ese maldito lugar. Renjun gustaba pensar que él podía parar esto cuando quisiera, aunque muy dentro suyo sabía que no era cierto. Era tan difícil estar alejado de él, y lo que había empezado en hermosas habitaciones había pasado a fugaces encuentros en estacionamientos desolados.

Aún recuerda cuando sus miradas se encontraron por primera vez, fue como un tirón magnético de esos brillantes ojos negros y así empezó todo. Lo que había aprendido de esto, es que los amores ilícitos y miradas anhelantes, empiezan tan sencillamente pero te matan, y matan, y matan, un millón de pequeñas veces.

Mark le había prometido el cielo y la tierra tantas veces desde que empezaron lo que sea que fuera esto, elevó sus esperanzas hasta la luna pero siempre terminaba estrellándose contra la misma realidad. Tener que salir con vergüenza de aquel costoso auto, o despertar solo en su cuarto, y regresar con sus amigos con las mejillas rojas de impotencia y tal vez también de tristeza. Su rutina era la de siempre, el mayor llamaba y sabía que Renjun iría hasta el fin del mundo por él solo por la fracción de su tiempo que Mark estaba dispuesto a darle.

Dejar el caro perfume, que había tardado tanto en elegir sólo para él, en su estante, sin mucho arreglo o demás para no levantar sospechas. Para hacer como si es que Renjun no existiera. Vivir y revolotear alrededor de él, pero tener que alejarse sin dejar rastro alguno. Odiaba tanto vivir entre encuentros clandestinos y secretos jamás contados, pero una parte suya adoraba demasiado las sobras que recibía, no como antes, pero era suficiente para hacer que se quedase. Este amor a medias era como una droga mercuriosa que ya no funcionaba como las primeras cien veces, pero cuyo efecto era tan anhelado que Renjun la probaría otras mil con tal de acercarse a lo que una vez fue.

Cuando pasa a su costado en público, su mirada lo buscaría sin siquiera pensarlo aunque bien sabía que tal vez sería ignorado. Y así Renjun entendió a la fuerza, que las miradas robadas dicen la verdad de vez en cuando, pero también te mienten y te mienten y te mienten, un billón de pequeñas veces.

Habían semanas completas en las que Huang no escuchaba ninguna palabra del mayor y su corazón se estrujaba cada noche en pensar que tal vez él estaría haciendo feliz a otra persona, con regalos mucho más pensados de los que él jamás recibiría o viajes mucho más lejos que el motel a las afueras de la ciudad. Y se dormiría convenciendose que la próxima, él sería quien no respondería el llamado. Pero bastaba con ver su nombre en el buzón de mensajes de su celular, para volver a los brazos de ese hombre que tristemente jamás sería suyo por completo.

Y es que ese es el encanto de los amores ilícitos, te enredan en un juego de promesas jamás cumplidas, cariños mediocres y palabras vacías; donde el más débil saldrá herido y lamentablemente ese papel era el de Renjun. Solo un desliz, solo un error, solo se quedará en ello. Mark le había mostrado colores que solo podían ser vistos con él, enseñado un lenguaje que solo entre ellos podrían entenderse, unas emociones que solamente junto a él podría sentirlas. Y eso poco a poco lo estaba drenando por completo.

...

Luego de no oír de Mark por casi un mes, Renjun recibió una llamada de él a eso de las dos de la mañana. Ni un hola o disculpa por dejarlo colgando tres semanas y media, y aún así la voz del otro lado de línea lo hizo estremecerse como siempre. "Junnie, perdón por la hora pero... ¿Te paso a buscar?" Mark sabía muy bien la respuesta, sabía que este juego estaba hecho a favor suyo y que ciegamente Huang le diría que sí, incluso si desapareciera por tanto tiempo.

"En quince estoy listo".

Por supuesto que lo llevó a un hotel diferente esta vez, y claro que contrató la habitación más cara, siempre hacía lo mismo cuando desaparecía, Renjun ya ni se asombraba con estos trucos mediocres de hacerlo sentir mejor.

Luego de hacer lo de siempre y que el mayor le jurara que lo amaba mientras le besaba el cuello y que sus lágrimas de tristeza se mezclarán con las de placer; Mark se levantaría casi al instante, se alejaría de Renjun como si su piel emanara algún tipo de veneno mortal, tomaría una toalla y se bañaría tan rápido como pudiera para irse como si es que nunca hubiese estado. La mayoría de las veces Renjun pretendía estar dormido así evitaba que el otro viera sus ojos llenarse de lágrimas, sin embargo, hoy fue diferente. Su mirada estaba perdida en el televisor apagado de al frente, no se había levantado a ducharse tampoco y viéndolo en el mismo estado al salir del baño, preguntó: "¿Qué pasa cariño?"

"No es nada, solo... solo me preguntaba hasta cuando seguiremos con esto." Sin sorprenderse ni un poco por la respuesta, Mark se agachó a la altura de la cama y acarició su cabello con tanta delicadeza y dulzura que Renjun casi cree que se quedaría esta vez.

"Pronto todo será diferente mi niño, te lo prometo."

Ya había escuchado eso las suficientes veces para saber que no era cierto. Quería gritarle que dejara de decirle "cariño" o "mi niño", que dejara de mentirle en la cara como si es que fuera estúpido, que se diera cuenta que del desastre que había hecho de él, que viera al tremendo idiota en el que lo había convertido. Quería decirle que se fuera a la mierda y que no lo busque de nuevo, porque no sería recibido, quería gritar tan fuerte que no volviera hasta que puedan de una maldita vez dejar este amorío barato.

Pero por supuesto que nada de ello salió de sus labios.

"Te creo."

Mark sabía muy bien que Renjun estaba al tanto de la falsedad de su promesa; pero también sabía que por él, Renjun se arruinaría a sí mismo un millón de pequeñas veces.

me gustó mucho escribir este shot jiji un poco de drama antes de las fiestas no hace mal amigxs. no sé si alcance a escribir un especial de navidad pero haré todo lo posible de hacerlo antes de año nuevo f.
ya saben, cuídense mucho :)

lxs tkm 💕💕

renjun haremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora