Élite; Bangpink.

♡┊ Nueve.

Se miraban la cara las unas a las otras en la habitación, pensar que hacía unas noches eran cinco y ahora, una estaba muerta, mientras la otra había salido corriendo en cuanto las vió.

Jennie daba vueltas en la habitación como un pequeño león en una jaula, jugaba con sus manos nerviosa, sentía que en cualquier momento derivarían la puerta y las someterían a un interrogatorio, tenía la tendencia de exagerar todo.
Aún cuando solo se trataba de unas preguntas de rutina, no podía evitar que sus nervios se alteraran.

— Jennie no vas a dar vueltas por la habitación toda la noche, ven a sentarte tenemos que hablar. — habló la pelinegra, señalando el silloncito frente a ella.

— ¿Creen que nos culparán? Digo, nosotras fuimos las últimas en verla, apagamos las luces a los ocho y ella estaba aquí.

— Rosé, creo que sucedió en la mañana, la puerta estuvo con seguro toda la noche, la cerré yo, en cambio cuando nosotras despertamos ella ya no estaba y la puerta no tenía seguro.

— Jennie tampoco estaba, — volvió a hablar la rubia, mirando a su amiga.— ¿Tú saliste con ella? ¿Por qué estabas afuera?

— Cuando yo desperté ella ya no estaba, desperté temprano porque quería buscar unos papeles del director que olvidé en la sala del consejo.

— Repasemos los hechos, — comenzó Jisoo. — nos fuimos a la cama a las ocho, Rosé y yo despertamos a las siete, a tiempo para la primera clase, bajamos las escaleras y encontramos a Jennie frente a la sala del consejo.

— Yo desperté a las seis treinta, caminé un poco para tomar el aire y cuando abrí la sala, ella estaba ahí, grité y más estudiantes llegaron para mirar la escena, después llegaron ustedes.

— Hasta ahora no tenemos nada concreto, pero tampoco podemos resolver un asesinato nosotras, debemos dejar esto a la policía. — habló decidida mirando a sus amigas.

— Jisoo, pero-

— Sin peros, esperemos que los policías vengan a interrogarnos, por ahora vamos a quedarnos aquí.