Los sollozos de Angelina hacían que mi cabeza quisiera explotar de dolor. La angustia en su mirada de no saber qué sucedería a continuación la estaba matando mentalmente.
Sé que ésta chica había interactuado conmigo en la tierra, lo podía sentir en mi interior. Y me importaba una mierda lo que decía Lucifer sobre que estábamos hechos el uno para el otro pero que no nos amábamos.
El rey del infierno no sabía nada.Pero yo podía jurar que en mi interior, me había enamorado de Angelina. Sabía que cuando "Angela" se sentía vulnerable o se mostraba amable ante mí, era Angelina. La bebé que me arrebataron para que ya no la cuidara más, pero que con el tiempo, ella fue más lista que Lucifer. Y ahora que entendía eso, podía sentir no solo la conexión que teníamos, sino también el amor que sentí por ella desde que la vi por primera vez. Pueden llamarme pervertido, pero sé que, aunque no estuviera destinado a ella, aún la amaría.
El ser demoniaco parecido a Angelina sacó un cuchillo de un lugar desconocido a mi vista, lo presionó sobre la garganta de Angelina y espero, mirándome con sorna.
El demonio miró a Lucifer y éste asintió.
Lo que nadie vio venir fue que Angelina tuviera una pequeña cuchilla y soltara sus amarres, con agilidad hirió el brazo del ser demoniaco, se levantó y con fuerza le quitó el cuchillo. No espere que ella cortara el cuello del demonio. Y como en una escena pude ver cómo en cámara lenta, ella le cortaba la cabeza al demonio, cayendo éste a sus pies.
Lucifer se movió tan rápido que me fue imposible ver sus movimientos. El cuerpo casi inerte de Angelina cayó a mis pies.
— Sé que también sientes lo mismo que yo — balbuceó.
Sangre salía de su boca pero no había herida alguna en su cuerpo.
Sin poder evitarlo, lágrimas calientes salieron de mis ojos, rodando por mis mejillas, levanté mis manos para secarlas pero era casi imposible, ya que salían a mares. Caí de rodillas al suelo caliente.
Tomé su hermoso rostro entre mis manos, intentando limpiar la sangre.
Los pasos enojados de Lucifer me hicieron saber que él aún no había terminado.
— Seguiré aquí aunque ellos te hagan parecer que no, y aunque los del cielo te hagan creer que lo que sentimos es un pecado. — susurró, mientras una lágrima corría sobre su sentido.
Tocando su rostro con suavidad, le di un casto beso en sus hermosos labios. No me importó llenarme de sangre.
— Amarte es mi pecado, pero, amor mío, me quedaría viviendo en el infierno toda una vida si de pecar por ti se trata.
Con estas últimas palabras, Angelina desapareció. Sé que había sido Lucifer ocultándola de mí.
Lo caliente de la tierra quemaba mis rodillas pero no me importaba, sabía que los humanos que estaban siendo torturados por sus pecados frente a mí, sufrían más dolor y el mío era mísero ante el de ellos. Bajé mis manos y las puse en el suelo, quería que esto desapareciera, quería no haber visto tal cosa, pero deseaba con toda mi alma y con odio total, destruir a los seres que había permitido que esto les sucediera a los pecadores y a Angelina. Y que permitiera que en la tierra, a los justos, les sucediera casi igual que en este lugar.
Destruiría a los que se hacen llamar mi padre.
Destruiría a Dios y a Lucifer.
FIN...
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El Pecado De Ared (Sinner #1)
FantasyAred es un ángel que es enviado por primera vez a la tierra a cuidar de un humano, la orden es cuidar de ese humano hasta su muerte pero surge un problema el cual nadie se lo esperaba... ¿Pero qué sucede cuando un ángel se entrega por completo a un...