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"Michelle, Michelle eres un monstruo del infierno
Sabes cómo ser cruel cuando sacudes tus caderas de esa manera
Y pintas tus labios de esa manera"- Michelle, Sir Chloe
Arabella caminaba del brazo de Joe en aquel baile de beneficencia, su madre no había podido asistir debido a que estaba en New York firmando unos acuerdos con su empresa de moda. Así que debido a que cada vez que no quería hacer algo su padrastro le recordaba el incendio en la cocina decidió ir. Alexis se alegraba que la relación entre ambos fuera tan cercana, parecía que cada vez su hija confiaba más en el hombre.
Llevaba un vestido ajustado color rojo, con los hombros descubiertos que la hacía lucir hermosa, su cabello en ondulaciones con un antifaz bastante costoso que llevaba en su mano y colocaba en su rostro con demasiada elegancia.
Al entrar Arabella cree que es exagerado estar recaudando dinero para niños pobres en fiestas con tanto lujos, aun así, no dice nada, Joe la presenta como su hija a varios de sus socios y amigos mientras ella solo fingía una sonrisa, no se sentía cómoda allí pero tampoco quería hacer sentir mal a su padrastro, bebe una copa de champagne que el mismo hombre le consiguió mientras siguen saludado sin parar. Christian aparece frente a él con un antifaz, con su porte elegante mientras Joe sonrie viéndolo.
- No pensé que vinieras aquí señor Grey, como siempre un placer verlo
- Mi madre me obligo- responde el hombre- señorita Arabella es un gusto verla nuevamente, luce encantadora
- Lo mismo digo señor Grey- sonrie- muchas gracias por su alago
Joe sonrie tomando su teléfono cuando suena.
- Perdóname, cariño debo contestar- suspira- vuelvo de inmediato si
- No te preocupes papi- sonrie ella
El empresario sonrie alejándose de ellos mientras contesta la llamada saliendo del salón para poder escuchar mejor la persona al otro lado de la línea, Christian tiende su brazo el cual Arabella toma con elegancia caminando con él por el lugar.
- Esto me recuerda a 1800, solo falta que deba conocer a mi esposo- sonrie Arabella- creo que es un poco exagerado
- ¿Lo crees realmente?
- Si
- Creí que Los Ángeles era un poco más exagerado que esto
- En los ángeles la gente solo quiere fornicar- sonrie – no demostrar quien tiene más dinero
- Eres cínica al decir ese comentario luciendo un vestido como el que traes
- Lo es- sonrie ella con el antifaz en su mano poniéndoselo en su rostro- pero quizás un poco de mi burbujeante personalidad es lo que necesita esta ciudad... por cierto vi a Elena el otro día cuando fui de compras con mi papi
