Capítulo 199: El hombre bestia

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Al final el Rey Porthos hizo mucho escándalo para nada... primero quería que combata contra su hijo y luego nos detiene justo cuando estábamos por comenzar... no lo entiendo.

(No deberías de estar quejándote tanto, te permitió ser un pretendiente y no saliste lastimado... realmente fue una doble victoria)

Viéndolo de ese modo... en realidad tienes razón, aunque me quedé con las ganas de pelear

(Solo te quedaste resentido porque Felton te logró pegar)

Sí... pequeño talentoso... su golpe de me dolió bastante

(Yo te dije que no te confiaras)

¿Me lo recordarás siempre?

(En cada oportunidad que pueda)

Entonces, la próxima vez que un niño me amenace no duraré en patearlo

(Interpretaste muy mal las cosas... por favor, te pido que no estés pateando niños)

-Buenos días Príncipe (sirviente a)

-Buenos días Príncipe (sirviente b)

-Buenos días

Salí de habitación y me encuentro con dos sirvientas que estaban esperando a las afueras.

-¿La habitación fue de su agrado? (sirviente a)

-Totalmente, he logrado recuperarme por completo

Luego de mi casi combate con Felton, lo único que hice en el resto del día fue darme un baño y acostarme a descansar. Hacía un día que no dormía, Dantalian exageró haciéndonos viajar toda a noche... por lo que, tuve que recuperarme por completo.

-La Princesa Kenya nos ha puesto a su disposición, por lo cual, cualquier cosa que necesite, solo nos lo tiene que decir (sirviente b)

-De acuerdo, lo mantendré en cuenta

Ahora quiero ir a ver a mi hermano para saber qué es lo que haremos en el día.

-El Príncipe Dantalian está en el comedor (sirviente a)

Cuando estaba por tocar la puerta de la habitación de mi hermano, la sirvienta me detuvo.

-Es bueno saberlo, entonces iré hacia el comedor

Doy varios pasos y topo con tres pasillos distintos...

(No tienes idea a dónde está el comedor ¿Cierto?)

Estas mansiones son excesivamente grandes, debería ponerles señalizaciones

-¿Quiere que lo guiemos hacia el comedor? (sirviente b)

-Si es posible, se los agradecería

-Por supuesto, síganos (sirviente a)

(Parece que Kenya intuyó esta situación y por esto puso dos sirvientas a tu cargo)

Que suerte que lo hizo... podría haber terminado en cualquier lado...

-Muy bien, aquí estamos (sirviente b)

-Muchas gracias

-No fue nada (sirviente a)

Luego de caminar un poco, terminamos llegando al comedor, donde puedo ver a mi hermano, a Kenya y a Felton... me da gusto que Aramis no esté.

-Buenos días Princesa, Príncipe y hermano

-Buenos días (Kenya)

-Buenos días (Felton)

Me convertí en un príncipe demonio / Volumen 2: Entre dos ReinosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora