Sᴏɢɴᴀʀᴇ

Dᴏᴅɪᴄɪ

Ambos se miraron aterrorizados, Taehyung tomó nervioso su móvil y tragó saliva. Aclaró su garganta y contestó, Jungkook aún tenía sus manos en su cintura y lo miraba expectante.

- A-Amor, ¿qué sucede? - Intentó sonar normal, pues aún estaba ebrio. 

- Solo quería saber que mi angelito estaba bien, ¿está todo bien? - Kim, por más que su novio no pueda verlo, asintió.

- Si, todo bien. ¿Era solo eso? - Silencio, nadie dijo nada por unos segundos. Taehyung abrió los ojos al nota que lo que dijo se podía interpretar muy fácilmente - N-No quería sonar grosero, bebé -

- Todo bien, disfruta Tae. Te amo - Y colgó, sin dejar que el castaño respondiese. Suspiró, hizo un puchero y miró a Jungkook que no sabía de qué hablaba la pareja. Estaba metido en más problemas de los que ya tenía.

El azabache dudó si preguntar cómo estaba o si  era correcto volver a la maratón de besos, sus ideas se borraron de su mente cuando escuchó a su mayor bufar, iba a esperar a que él hable.

- Esto no está bien, Jungkook. No es justo para Jimin, me siento un asco de persona. J-Jimin significa todo para mí, cuando más solo estuve, el me brindó todo su amor y compañía, sin juzgarme. Fue la persona que más me amó - Taehyung empezó a llorar y escondió su rostro en el pecho del contrario. Este acariciaba su cabello en silencio - -L-Lo lamento, tal vez fue el alcohol y el ambiente - 

El menor suspiró grave, no respondió nada. No hacía falta. Comprendía muy bien a Taehyung, a situación era muy complicada y en cierto punto eso era por su culpa también. Se quedaron unos minutos más abrazados y Jin entró a la cocina riendo. Quienes estaban aferrados a un íntimo abrazo se separaron rápidamente.

- Eres un dolor de huevos, Jinnie - Jungkook revoleó sus ojos y miró aún más enfadado de lo que ya estaba debido a la repentina llamada del novio de su amado.

- Hey, Kookie, ¿malhumorado tan temprano? La noche es joven hermano, ¿acaso Taehyung no correspondió tu beso todavía? - Era evidente que Jin también estaba ebrio. La pareja no pareja abrió sus ojos y se sonrojaron - Mierda, no me digas que lo besaste -

- Cierra la boca, Kim - Taehyung soltó de la nada por la vergüenza y tapó su cara roja.

- Wow, realmente serían una pareja ideal, Jungkookie. Tiene tu personalidad. Tranquilos, no diré nada - Jin se fue sin más con una botella de alcohol en sus manos. Tae separó sus manos de su cara y miró a un Jungkook que lo miraba con una sonrisa y unos ojitos que brillaban por la adoración.

Por más que Taehyung diga que el beso fue un error, Jungkook esperaba que se equivocase más seguido.

A Taehyung le gustó eso, le gustó leer ese sentimiento en él, le gustó saber que Jungkook lo miraba como si fuese el típico adolescente cliché que estaba enamorado por primera vez. Inconscientemente sonrió tierno aumentando la sonrisa que tenía su menor.

El silencio que los inundaba era íntimo, para nada incomodo, solo lo disfrutaban porque tenían la presencia uno del otro. 

Decidieron volver a la sala, aún estaban algo ebrios pero lo controlaban. Notaron como algunos seguían sentados en el sofá y otros en el suelo. Sorprendentemente, algunos seguían bebiendo del vodka.

Taehyung y Jungkook se sentaron en el mismo sofá que antes solamente que más pegados. Jeon acariciaba disimuladamente el muslo de Kim.

- Kim Taehyung, ¡tu obra nos hará millonarios a todos! - Seulgi reía boba sobre el regazo de Mark quien repartía besos en el cuello de la chica. Taehyung sintió envidia, él quería estar en esa posición con Jungkook. Formó un puchero con sus labios, el azabache apretó suave su muslo como si hubiese captado a la perfección la molestia del castaño con tan solo ver su puchero.