「❛ ━♡ Stole him! - hhj + yji ♡❜」

━━❝ Sҽʋҽɳƚԋ 🌈 ❞

Jadeos continuos salían de sus húmedos labios, gotas de sudor caían por su sien a pesar del frío ambiente, aunque eso no importaba, él sentía calor, y presión, mucha presión...

Bah, Hyunjin realmente odia correr.

Pero momentos como ese era necesario, pues, para sorpresa de nadie, Hwang se volvió a quedar dormido. Con la única diferencia de que esta vez realmente pensó en quedarse en cama, hasta que recordó la exposición por la que se durmió tarde y que ha estado estudiando desde hace semanas.

Puede ser irresponsable, pero su orgullo no le permitiría echar a la basura tantas horas que pudo haber pasado admirando el feed del instagram de su bebito.

Ah, su feed es tan cute como él...

— Luego pensamos en Jeongin, Hwang, luego. — le abofeteó aquella voz cuerda en su cabeza. Si no llega en los próximos dos minutos al bloque, perderá la nota.

Ese último pensamiento se repitió una y otra vez en su cabeza, a su parecer como motivación, pero acabó siendo la razón por la que se detuvo.

Eso, y la pequeña mano que lo detuvo.

Hwang aspiró fuego, y se prometió aniquilar a quien sea que haya decidido que sería estupendo el arruinar su promedio. Sin entrar en cuenta que la pequeña mano que lo sostenía era la adorable manita del chiquillo que lo venía persiguiendo desde hace unos minutos al voltear.

— Hyun-Hyunjin hyung... — un asustado Jeonginnie por la oscura mirada que le dirige el mayor se encoge en sí mismo, y por un momento realmente tuvo miedo, pero de haber molestado sin querer al hombre y que esté ya no desee ser su amigo.

Apenas iba saliendo de su primera clase del día y se dirigía a hablar con... Su novia, hasta que vio al mayor y decidió pasar a saludarlo a él primero. Esperando con ansias sus cálidos abrazos con dulces sonrisas y no esa mirada prendida en fuego que hizo que bajara la cabeza arrepentido, con su cabeza hecha un lío sin saber que es lo que hizo mal como para enojarle y una forma de arreglarlo.

— L-lo siento... — se disculpó sin realmente saber de qué. Hyunjin se apresuró a abrazar fuertemente al sensible y arrepentido chico en sus brazos.

— No, bebé, no hiciste nada malo. — intentó calmarle a base de caricias en su espalda, lo abrazó aún más fuerte al sentir su cuerpo pequeñito en contra de él temblar. — Solo estaba algo apresurado, pero no es nada.

Claro, si nada era sinónimo de poder perder la carrera, pero Jeonginnie no debería saber eso.

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El camino de Hyunjin a su casa después del día de estudios es tranquilo, sin muchas personas transitando por lo que no disimula el temblor de su cuerpo que de todas maneras pasa desapercibido por el frío.

El alivio es grande al haber tenido la suerte de que su profesor tuvo problemas para llegar y tuvieron esa hora libre.

Hora que aprovechó cada minuto junto a Jeongin, gozando el hecho de que el rubio lucía algo más nervioso y pegajoso que de costumbre.

Y claro, al igual que un Jeongin de cualquier otra forma, un Jeongin nervioso y tímido es extremadamente adorable. Y mucho más si este está buscando a cada segundo su atención y toma la iniciativa en los abrazos y al entrelazar sus manos.

Su corazón podría revolotear al recordar al Jeongin de ese día. Con su gran suéter tejido color crema y sus guantes blancos con huellas de gatito que apretaban sus propias mejillas cuando Hyunjin se quedaba inmerso en otra cosa que no sea el rubio mismo amante de su atención. Y aquel pequeño hair pin color rosa viejo que antes sostenía uno de sus rizos traviesos y con el que después jugó infantilmente haciéndole distintos peinados a Hyunjin, algunos más divertidos que otros.

Sin contar que se despidió de él jugando con sus manitas y regalándole un tímido beso en su mejilla que pudo haber hecho a Hyunjin levitar de tanto amor contenido.

La tarde sonaba fantástica en su cabeza. Cada una de las adorables escenas llenas de cariño y amor se estaría repitiendo una y otra vez en su cabeza si no fuera por aquella última que se le quedó trabada.

Aquella última que le está haciendo llorar incontrolablemente de camino a casa.

— Y-yo... — voz nerviosa, ojos sorprendidos. Hyunjin atento a cada acción.

— ¿Si, Jeongin?

— Terminaré con Mina-Noona, hyung.

Y Hyunjin se rompió.

¿Porqué no se siente tan bien como el pensó que sería? ¿Porqué sus hombros siguen temblando al ritmo de sus sollozos y sus ojos ya no ven el camino por el que pasa al estar llenos de lágrimas si fue lo que siempre quiso que sucediera desde un principio?

La presión en cierta zona de su pecho le hace saber que fue por el hecho de que le reveló aquello justamente cuando Hyunjin le dijo por primera vez a Jeongin que le gustaba.

No pensó que declararse por fin y no obtener respuesta dolería. No pensó que el egoísmo inconsciente pudiera dolerle tanto.

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soy susu triste ahorita,
losiento ᐢ. ֑ .ᐢ