Capitulo 12

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Las clases volvieron a retomarse después del descanso de Navidad.

Tom tuvo que soportar que otros cuestionaran su trabajo, incluso en

sus propias clases, sentados observando las reacciones ante sus alumnos

y su forma de tratarlos.
Tampoco en su despacho lo dejaban demasiado tranquilo teniendo que

responder preguntas estúpidas que no hacían más que ponerle más y

más cabreado pero nunca sin llegar a perder la cabeza. Respetaba la

política de la universidad, pero no la entendía, menos sabiendo que no

tenían ninguna prueba.
Tom les había dicho que llevó a ________ donde ella le pidió y la

dejó allí, no se preocupó más. Pero el hecho de que Jake la viera semi

desnuda al lado de su coche y que ella entrara dentro parecía ser

prueba suficiente para sospechar más. Y no iban mal desencaminados.
Pero al margen de que su vida laboral estaba siendo cuestionada, no

solo por su supuesta relación con una alumna, sino también por la

agresión a un alumno, lo único que le importaba era ________. Había

dejado de asistir a sus clases y apenas la veía por los pasillos. Julian

estaba preguntando al resto de profesores sobre su posible carácter y

comportamiento en sus clases y eso le enfurecía. No conocía a

________ era imposible que ella sedujera a los demás profesores porque

estaba seguro de que lo amaba a él, solo a él... Al menos hasta que la

rechazó.
Aún tenía pesadillas de ese momento. Se levantaba en plena noche

completamente sudado, jadeando y con su nombre en la boca. Le dolía

pensar en las lágrimas que había derramado en el coche y solo

esperaba que todo acabara, si tenía suerte, en unas semanas.

________ tampoco lo estaba pasando bien. Después de pasar las

navidades encerrada en su habitación llorando por esa maldita relación

lo único que tenía claro era una cosa: Tom era un cerdo.
Estaba segura que después de conseguir tener un buen polvo con ella;

de permitirle hacerle cosas que jamás hubiera pensado, se cansó de ella

y la dejó a un lado alegando que solo debían ser “profesor y alumna”.

Pero a pesar de eso no podía quitarse de la cabeza y de su corazón el

profundo sentimiento que tenía hacia él.
No quería volver a pisar las clases del profesor Felton y procuraba no

encontrarle en los pasillos. Vigilaba buscándolo y, cuando lo

encontraba, trataba de esconderse o daba media vuelta para no verlo.
Los exámenes estaban a la vuelta de la esquina y le vino bien centrarse

en algo que no fueran sus sentimientos destrozados. También tenía a

Sarah en la que se apoyaba cada vez que los recuerdos afloraban. Le

proponía buscar un reemplazo para el profesor pero era rechazado

directamente. No quería un reemplazo; a pesar de querer odiarle con

todas sus fuerzas, en el fondo, seguía amándolo.

Unos golpes en la puerta hicieron que Tom levantara la cabeza

extrañado. Era demasiado tarde para las tutorías y no tenía previstas

más visitas.
-Pase.
Sarah abrió la puerta del despacho y la cerró tras de si. Llevaba una

minifalda lo suficientemente corta para provocar un ataque a cualquier

hombre y la camiseta no debía haber costado demasiado teniendo en

cuenta la poca tela que habían usado.
-Las tutorías han acabado señorita.
-Me preguntaba si podría darme una privada, profesor. - Dijo ella

acercándose y apoyando las manos sobre el escritorio. Eso le hizo

recordar a ________. Cerró los ojos y apartó la cara. Tenía que dejar de

pensar en ella.
-Le pido que salga de mi despacho.
-¡Vamos, profesor! Lo pasaremos bien. No hay nadie cerca y seguro

que se le ocurren una o dos cosas para hacer aquí. - Replicó guiñándole.
Tom se puso de pie y la cogió del brazo. Se la acercó a él lo

suficiente como para que Sarah tuviera que alzar su cuello para mirarlo

a los ojos.
-Fuera- Sarah hizo un mohín y llevó su mano hasta la entrepierna de

él. Le apretó su pene y comenzó a acariciarlo para que se pusiera duro.
La apartó lo suficiente como para conducirla hasta la puerta del

despacho.
-Primero, yo no soy de esos. Y segundo, ya estoy enamorado de

alguien.
Abrió la puerta y se encontró a dos hombres parados frente a él.

Miraban más a Sarah y a su mano agarrando el brazo de ella que a él.
-¿Enamorado de ________- Preguntó Sarah sonriendo.
-¿Qué es lo que pasa aquí?- Inquirió Tom.
-Lo siento, profe. Tenía que asegurarme de que no era de los que se

aprovechan de sus alumnas y, cuando lo han conseguido las abandona.
Tom frunció el ceño. No le gustaban las bromas, y menos a su costa.
Sarah se volvió hacia los hombres y les susurró algo tras lo cual

desaparecieron del pasillo. Se volvió hacia él y su carácter divertido y

afable cambió por completo.
-Tenemos que hablar de alguien en común.
-No hay nada de qué hablar. - Dijo entrando de nuevo a su despacho.

Sarah lo siguió y cerró la puerta.
-Yo creo que si. Me gustaría saber el motivo por el que la rechazó.

Acaba de decir que la ama.
-No he dicho tal cosa.
-¿Entonces quiere follarme a mí? - Le preguntó acercándose al

escritorio y apartando unos papeles para sentarse encima y mostrarse

en una postura de lo más sensual.
Tom, que estaba sentado en su silla, la miró sorprendido pero sin

tener ningún tipo de atracción hacia ella. No era ________.
-Lo suponía. Nadie que no esté enamorado se me resiste. Como ve

puedo ser muy persistente.
-No le quepa duda... - Masculló él.
-No lo entiendo, profesor Felton. Se supone que ambos sienten los

mismo. ¿A qué viene esto? ________ está destrozada.
-No hubiera pasado nada si hubiéramos esperado dos meses, el tiempo

en que ella saldría licenciada. - Sarah entrecerró el cejo. Agachó la

cabeza pensando qué decir para que la cosa fuera como quería cuando

se fijó en el sobre.
-¿Dimisión? - Lanzó al aire.
Tom saltó y cogió el sobre para apartarlo de su vista.
-¿Qué ha pasado aquí? - Preguntó ella.
-No es de su incumbencia.
-Si tiene que ver con ________, maldita sea, es de mi condenada incumbencia.

Profesor de Regalo (Tom felton y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora