En un Instituto lleno de abusivos es fácil encontrar una víctima nueva, más cuando este es alumno de intercambio.
Que triste, es que no sepan que meterse con ese
pequeño chico sería el final de sus vidas,
probablemente quien se saldría con la suya y...
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Las miradas de todos, los suspiros de las chicas van dirigidos al chico que entra al aula. Con su cabello color negro cubriendo parte de su frente.
Es apuesto, lo debe de admitir. Sin embargo, todo parece ir de maravilla. Nadie ha vuelto a molestarlo, al menos las chicas se alejan de él, y ha aullentado a las personas.
Le gusta más estar así, sin nadie alrededor.
---Joven Osorio. Puede sentarse al lado de donde antes era su lugar, espero que respete a su compañero que llegó ayer.
---Gracias profesora, y no hay problema. ---Joaquín lo observa y escucha.
A veces los populares son un problema más grande, si resulta que ese chico también planea molestarlo. Debe de protegerse, si. No importa si resultaba ser alguien apuesto.
Suspira con cansancio, y deja su mentón sobre su mano. Sumido en la clase que su profesora les da.
---Entonces, vean la actividad del libro. Ya podrán hacerla sin problemas.
Toma su lápiz y es en solo un segundo donde siente la bolita de papel impactar contra su mejilla.
---Uno...
Cierra sus ojos, Dios. Solo debe no tomarle importancia. Probablemente se lo querian lanzar a alguien más, o es una nota. Resuelve los ejercicios como lo sabe, borra sus pequeños errores y vuelve hacer los procedimientos.
Y lo siente, otra bolita de papel ir contra su brazo.
---Dos..--- Susurra.
Regresa a lo suyo, y muerde la madera del lápiz. Pensando si es buena idea levantarse y entregarlo.
Las risitas que escucha un poco lejanas lo comienzan a molestar, ve de reojo y ahí los encuentra. Dos hombres, dos mujeres haciendo más bolitas de papel. Una de ellas les susurra algo, y uno de los hombres asiente para agarrar un puñado.
Esta esperando, tener una excusa para después desquitarse de otro modo.
---Profesora. ---Todo su plan se destroza al escuchar al chico de su lado llamar a la docente.
---¿Si joven Osorio?
---Yaelin, Jane, Jae y Luke están lanzando basura.
---Los mencionados, fuera de mi aula. Tienen cero en actividades. ---Ordena.
---¡No es cierto! , nosotros no hemos hecho nada malo. ---Joaquín escucha los quejidos.
Cierra sus ojos con fuerza, se supone que debía recibir otro ataque. Ahora es como si fuese una damisela en apuros, y un príncipe le hubiese ayudado.