El grito de Sagitario había alarmado a Cáncer y Aries. Estaban a punto de entrar a la cabaña de Ryuu, pero un muy agitado Sagitario les obstruyó el paso impidiéndoles pasar.-¿¡Que sucede!? ¿Por qué gritaste?- pregunto Cáncer preocupado por su amigo.
-A-acabó de ver al papá de Piscis- la voz de Sagitario comenzaba a sonar temblorosa- El estaba..el estaba..- pero antes de que pudiera decir algo más Ryuu salió por la puerta.
-Siento que me hayas visto mientras me cambiaba- Ryuu miraba a Sagitario con una expresión de terror- Entre a la ducha y se me olvidó ponerle seguro a la puerta- Aries y Cáncer asintieron como si eso hubiese sido la causa de que gritara su amigo.
-Es Libra- soltó Cáncer- Está herido- Instantáneamente el rostro de a Ryuu cambió a uno de preocupación.
No tardo mucho para que Cáncer los guiara a al lugar en el que se encontraba Libra. Mientras tanto Ryuu y Sagitario se quedaron a una distancia un tanto considerable con el propósito de que los demás no los pudiesen escuchar.
- A ver si entiendo- paro en seco Sagitario- En conclusión, ¿Tu y el papá de Capricornio son pareja?- sentenció con una mirada de asombro.
-Bueno... podríamos decir que si-soltó sonrojado por recordar el encuentro que había tenido con Kenichi- Solo te pido que no le cuentes a Piscis de esto....
-Mmm, tarde o temprano tendrás que decirle a Piscis, a el no le gusta que la gente le oculte cosas y menos que le mientan- su rostro mostraba reflejaba seriedad - en especial de su padre.
-Lo se... ya pensaré en algo-vocifero Ryuu viendo al piso.
Por otro lado Aries se estaba comenzando a desesperar ¿Cuánto más tenían que seguir caminando? Le comenzaba a preocupar que el peli azul si estuviese herido de verdad.
-Tarado- susurró a la nada como si aquel insulto le llegase mágicamente a Libra.
-¿Dijiste algo?- pregunto Cáncer al mismo tiempo en que seguía caminado sin despegar la vista del frente.
-No, nada- vocifero Aries en un intento de ocultar lo que había dicho- ¿Cuánto tiempo más falta ?- trató de cambiar el tema.
-Ya no debemos de tardar, de hecho- señaló con su mano- Es justo pasando ese árbol.
A lo lejos se podía divisar a Libra con su polo blanca recargado en un tronco. Parecía que llevaba bastante tiempo esperando debido a que se había quedado dormido.
-¡Libra!-gritó Cáncer a todo pulmón logrando que el peli azul despertara de golpe y el dolor le regresara.
-¡Agh!, No grites- dijo quejándose con una mueca de pocos amigos.
De un momento a otro Ryuu llegó al lugar en el que se encontraba Libra arrumbado.
-Tal parece que hoy no es tu día- dijo Ryuu al mismo tiempo en el que inspeccionaba su herida- Bueno no soy doctor, pero por lo que veo te doblaste el pie.
-¿Pero y la sangre de alrededor?- pregunto Cáncer todavía preocupado por su amigo.
-Mmm, veamos- volvió a inspeccionar la herida- Se cortó con estos pedazos de vidrio- dijo tomando los pedazos que había en el suelo.