Blake

Parte 3: Exponiendo poderes

Pov's Blake

Mi cuerpo golpeó con fuerza contra el suelo de metal de varios pisos por debajo.

Escuché la voz de la pelirroja decir a través de un auricular que estábamos bien. Pero un gruñido nos hizo levantar la cabeza, Banner se retorcía y gruñía con fuerza.

-¿Estamos bien, verdad?- Pregunté con temor a tener que enfrentarme a un gran monstruo verde con problemas de ira que por dentro era uno de los científicos más renombrados del mundo.

-Eso espero- susurró la espía dándome mala sensación- Doctor... Bruce luche, esto es justo lo que quiere Loki- dijo ella todavía desde el suelo.

-Si... no queremos que ese pirado se salga con la suya. Todo irá bien- añadí mientras me ponía de pie y observaba a la pelirroja, viendo como esta se encontraba atrapada bajo una barra de metal, le hice un gesto indicandole que iba abuscar algo con que hacer palanca.

Cuando volví Banner se encontraba en plena conversión, sin demora hice palanca con un tubo de metal liberando su pie justo cuando un grito nos alertó. Al levantar la mirada vi a Hulk lanzandonos un golpe, sin pensar me coloqué delante de la espía volviendo mi cuerpo de metal. El golpe me acanzó lanzándole lejos. Provocando que mi cuerpo chocase violentamente contra una pared. Tosi alorodida, menudo golpe.

-¡¡Blake!!- escuché en un grito.

-¡¡Corre!!- es lo único que me limité a decir. Si convirtiéndome en metal me había dolido tanto no me quiero imaginar lo que le hará un golpe a ella.

Escuché a Hulk volver a gruñir y escuché fuertes pasos alejarse. Me levanté con dificultad y volví  mi piel normal, acontinuación corrí por donde se habían marchado los otros. No fue difícil encontrarlos solo tenía que seguir el camino de destrucción, golpes y abolladuras, además de un montón de destrozos en la estructura de metal que solo alguien podía haber ocasionado.

Al girar una esquina vi a Hulk alzando el brazo dispuesto a hacer papilla a Natasha. Así que con rapidez me telestransporté justo detrás de Hulk, subida a su espalda, y lo único que se me ocurrió fue tapar con mis manos sus ojos. Haciendo que se enfadara y comenzara a retroceder golpeándose con todo y a mi en el proceso.

-Banner por favor- rogé ante el dolor. Un nuevo golpe provocó mi caída al suelo. Se giró y alzó los puños para volver a golpearme pero me transporte detrás de él antes de que aquello ocurriese.

Así me pase unos minutos, esquivando todos los golpes que pude, rezando porque se cansara.

Nunca había utilizado mis poderes para dañar y muchos menos me había encontrado en una situación así, por lo que no tenía ni idea de que hacer.

En uno de los movimientos no conseguí alejarme a tiempo y me golpeó haciendo que cayese metros más lejos, al borde de la nave.

El aire golpeaba con fuerza, me costaba respirar, debía tener varios huesos rotos, muchos a decir verdad. Lo golpes de Hulk no eran suaves.

El mencionado se acercaba furioso y yo, desesperada decidí probar algo nuevo. Me volví a transportar volviéndome a enganchar en la espalda de Hulk, o en una parte de ella, y colocando mis manos en su enorme cabeza me concentré.

Me llevó varios minutos, varios minutos en los que recibía golpes en mi ya magullado cuerpo. Pero tras esos minutos noté como los movimientos de este eran cada vez más lentos y torpes.

Sí, estaba funcionando.

En mil idiomas di gracias porque así fuese. Lo que no esperé es que en uno de los últimos movimientos el grandullón tropezara y cayese de la nave conmigo todavía enganchada a él.

Como pude en el aire me separé de él y volví a transportarme, cayendo con brusquedad en el suelo de la nave, haciéndome soltar un gritó de dolor.

No sabía que dolía tanto.

-Blake... Madre mía ... ¿Estás bien?- escuché decir a la pelirroja mientras se colocaba a mi lado.

No

- Si, solo ha sido un golpecito- dije en un susurro ante el dolor.

-Un golpecito tras otro- contestó irónica- debo llevarte a qué te revisen, sangras y seguramente tengas varios huesos rotos- volvió a decir preocupada mientras intentaba taponar una herida en mi cabeza.

En ese momento sin poder evitarlo me introduje viendo cada uno de sus recuerdos. Recuerdos traumáticos y perturbadores. Había tenido una infancia difícil y un pasado oscuro, muy oscuro.

-No puedo, Blake está herida- escuché decir a la chica, lo que me hizo volver en mi. Supe que hablaba con alguien a través del comunicador.

-Vé- dije suave- me recupero rápido-

A levantar sus manos vio como la herida de la cabeza se cerraba poco a poco, y con los huesos pasaría lo mismo, se me colocarían y unirían rápidamente. Solo tendría que soportar el dolor hasta entonces.

Insegura me observó, para después tras unos segundos asentir y alejarse con rapidez.

Llevé mis manos hasta mi bolsillo sacando de allí un Kinder bueno y un kikat, o bueno, lo que quedaba de ellos, ya que casi eran puré. Lo desenvolví y me lo comí.

¿Qué? El cerebro funcionaba con glucosa, mucha glucosa y más el mío.

Era mi único fallo, con respecto a los poderes, debía consumir dulces frecuentemente. Y eso no era bueno, ¿Como diría en mitad de una lucha que me den un tiempo para comer y poder patearles el culo? Si no los tomaba mi cuerpo comenzaba a fallar.

Tras varios minutos, cuando pude ponerme en pie, aún aunque tuviese varias costillas y el brazo fracturado me dispuse para ayudar.

Solté un suspiro y me transporté hasta la celda de Loki. Justo en el momento en que este apuñalaba Phill por la espalda.

-¡¡Phill!!- grité impactada mientras le veía caer al suelo.

-¿Y tu niña? ¿Quién eres?- preguntó Loki con burla.

-Tú peor pesadilla- contesté con odio para transportarme a su espalda y antes de lo que se esperaba convertí mi puño en metal golpeándolo y haciendo que volase varios metros lejos de mi.

Iba a seguir golpeándolo pero de reojo pude ver cómo Phill perdía poco a poco la vida. No podía permitirme lo. No moriría. Notaba el odioso nudo en mi garganta y mis ojos aguados.

Me acerqué a él colocando mi mano en su hombro y concentrandome en ayudarlo. Vi como Loki se acerca a un panel de control, apretó un botón y un fuerte ruido me hizo girar la cabeza hacia una enorme jaula de cristal con Thor dentro, que no había visto. Tras eso cayó al vacío.

Otro que he dejado caer.

Intenté quitar la culpabilidad de mi mente, Thor era un dios, uno que volaba, lo más seguro es que estuviese bien.

-Bueno...como veo que te gustan las causas perdidas - Volvió a burlarse Loki señalando al agente- y yo no lo soy, me voy.

-Atrapalo- susurró Coulson con dificultad.

Pero yo solo negé. No lo dejaría morir. No volvería a ver morir a alguien que me importa.

Me concentré más y sentí el dolor. Noté como el pulso de Phill cogía fuerzas y el mío las perdía.

-¿Pero qué?- dijo este confundido a encontrarse sin dolor y en perfectas condiciones. Pero su felicidad duró poco al mirarme.

Mi ropa se llenaba rápidamente de sangre, perdí la fuerzas en mis piernas y caí. Pero la caída fue parada por Phill.

-No...- comentó asustado -¿Que has hecho? No puedes morir, no puedes hacerlo Blake-

No podía curar las heridas de otra persona, pero si podía transpasarlas a mi cuerpo. Y eso es lo que hice, porque el agente Philadelphia no debía morir.