"Axel 15": ~Final Wars~

Un Mal tiempo

Todo parecía normal en las calles de Nueva York, era una noche tranquila, donde uno podía dormir plácidamente, sin ningún ruido, o así era todo hasta que... el sonido de las alarmas de una joyería rompería el silencio de la ciudad, desde el techo de un edificio, una figura masculina observaba el incidente, aquella figura desaparecería ante un inminente brillo blanco.
En la escena que se llevaba el crimen, la joyería estaba rodeada por autos policiales, mientras los ladrones de joyas estaban dentro con 5 rehenes.

- deténganse están rodeados, devuelvan las cosas y dejen a los rehenes libres, del caso contrario abriremos fuego - dijo uno de los policías con el altavoz de su auto policial.

- ¡púdranse!, si dan un paso más estos imbéciles no regresaran a casa con sus familias - dijo uno de los ladrones, quien llevaba una máscara negra, sostenía a una mujer de cabellera rubia en uno de sus brazos mientras le apuntaba con su arma. - será mejor que se larg...

Aquel ladrón no pudo terminar la frase, pues algo que ni siquiera pudo ver lo había golpeado en todas partes de su cuerpo, también le había arrebatado su arma y a la mujer rubia, sin darse cuenta ya estaba tirado en el piso, observando como sus compañeros eran golpeados por algo misterioso, que ni siquiera pudieron ver, los rehenes habían sido llevados afuera de la joyería, las cosas robadas había sido colocadas en sus estanterías y en los mostradores, las armas habían sido entregadas a la policía y ellos no sabían cómo paso eso, los ladrones estaban tirados en el suelo y esposados.

En un callejón cerca al lugar del incidente, una luz blanca desaparecía, mostrando a un chico con una chaqueta negra, camiseta verde, pantalones negros y tenis negros con blanco, de cabellera castaña y ojos café.

- Bueno, mi trabajo está hecho, regresare a casa antes de que mi madre descubra que no estoy en mi habitación y me mate - aquel chico era Axel, salía corriendo del callejón - (que mal que se me acabo el tiempo del reloj cuando llegue a ese callejón o ya estaría en casa) - se dijo a sí mismo en sus pensamientos.

...

Cuando Axel llego a casa, entro por la puerta trasera de la cocina, encontrándose con una mujer de cabello ondulado y traje de oficina.

- ¿Dónde has ido muchacho? - pregunto la madre de Axel, Rosa preparaba una taza de café, cuando sintió a su hijo entrar por la puerta de la cocina.

El oji café cerró la puerta lentamente, para luego girar a ver a su mamá, quien lo miraba con un semblante serio - ho-hola mamá, ¿Dónde había ido?, pues... salí a caminar, eso es todo mamá - el adolecente de quince, casi dieciséis años respondió con cierto nerviosismo a la pregunta de su madre, la cual comenzó a reírse por lo que dijo su hijo - no siempre te tengo que decir a donde voy.

Rosa se acercó a su hijo, acariciando su mejilla - claro que tienes que decírmelo cariño, eres lo único que me queda de tu padre, me preocupa mucho que te salgas sin decir a donde iras, tengo miedo de perderte - abrazo a Axel casi llorando, él solo correspondió al abrazo.