A las afueras de la ciudad de Efiria había un pequeño pueblo que era iluminado por guirnaldas en todos los puestos, faroles y calles, todo aquel que pasara por allí podría ver los diferentes adornos navideños colgados en cada esquina del lugar. El pueblo de Salacia era un pequeño lugar en donde no habitaban muchas personas, máximo un ciento; aunque no contaran con los altos edificios, la modernidad de las grandes ciudades y la innovación, eran felices. Aquel pueblo se le conocía por ser el lugar donde mayor espíritu navideño se hacía presente en las primeras semanas de Diciembre.
Todos los que habitaban en este pueblo siempre regozaban de alegría apenas se acercaba una festividad importante. Era la época de Navidad donde mayor actividad se hacía presente debido a la gran celebración de noche buena. Todos colaboraban con algo, ya sea ayudando a decorar la plaza, arreglar el teatro para la función de caridad o poner los puestos para la feria.
En la secundaria Santa Luz una jovencita de cabello castaño en forma de media luna cargaba una caja llena de adornos que llevaba al gimnasio para decorarlo, mientras caminaba por los pasillos se detenía a ver como los demás estudiantes ayudaban a decorar su colegio, todos mostraban sonrisas grandes, amabilidad y carisma, cada uno estaba vestido con atuendos de los colores característicos de aquella cercana festividad, en definitiva el espíritu navideño rebosaba ante todos.
Siguió caminando mientras tarareaba un villancico, en el momento que entró al gimnasio varios de sus compañeros se movían de un lado a otro, el decorado estaba quedando hermoso, las coronas navideñas en las paredes, las luces en el techo que caían como si fueran cascadas, los bastones de caramelo sobre las guirnaldas... todo era maravilloso; se acercó a una de las esquinas del salón donde encontró a sus amigas.
-- aquí están los adornos -- puso la caja en el suelo -- ¿qué más hay que hacer?
-- ya no mucho -- respondió su amiga pelinaranja quien estaba sobre una escalera mientras colgaba una corona navideña -- ayúdame con las luces, debo colgarlas por estos lados o se verá muy triste y oscuro -- su amiga buscó la rienda de luces -- May, ¿dónde está Drew?.
-- creo que dijo que iría a ayudar con la envuelta de regalos.
-- entiendo, ¿y ya sabes que regalarle?.
-- sí, por fin me decidí que es lo le voy a dar.
-- ¿de verdad?, ¿qué le vas a dar?.
-- es un secreto -- una sonrisa se formó en su rostro -- tengo que esperar hasta la media noche de la víspera de navidad.
-- ¿tú que crees que te va a regalar?
-- no lo sé, aunque... -- sus mejillas se tornaron de un leve sonrojo ante la imagen que se realizó en su cabeza -- ojalá y pasara lo que estoy pensando.
-- ¿y qué es lo que estás pensando? -- preguntó su amiga al verla abrazar las luces mientras una sonrisa tímida aparecía en sus labios.
-- no es nada -- intentó evitar la conversación -- solo son ideas mías, solo espero que lo que me regale sea algo del corazón.
-- que dulce eres May... aunque no te creo del todo, ya dime, ¿qué es lo que en verdad quieres?.
-- y-yo no quiero nada -- sus mejillas tornaron un sonrojo más intenso.
-- sabes, creo que ya no quiero decorar -- bajó la escalera con cuidado -- sube, te toca.
-- pero a mí me dan miedo las alturas -- miró con terror la escalera.
-- entonces dejémoslo por un rato -- tomó asiento en una esquina -- siéntate, hay que hablar.
-- de acuerdo -- ella se hizo aún lado de su amiga -- ¿de qué vamos a hablar?.
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Una Navidad Especial.
Fiksi PenggemarEspecial Navideño. Que Dios los bendigue a todos, ¡FELIZ NAVIDAD!.