La princesa y la chica mala - HyeWon

Capítulo 4

POV Chaewon

"No me importa, lo que sea en lo que te sientas cómoda, es tu casa después de todo." No quiero que se ponga más ropa, por alguna razón su cuerpo es fascinante, no quiero dejar de verlo.

"Me pondré una camiseta ya mismo".

Observo mientras busca una camiseta entre montones de ropa y basura. Finalmente encuentra una en el piso justo al costado a donde estoy sentada. Cuando se inclina para recogerlo, me encuentro mirándola con nostalgia, nunca había deseado a alguien tanto como la estoy deseando a ella. Ni siquiera al idiota de Wooyoung.

Después de cinco minutos de mirarla, me levanto y camino hacia ella donde está parada, ella solo se sirve otra cerveza. Estoy detrás de ella, nuestros cuerpos casi se tocan. Se da la vuelta para mirarme, se ve sorprendida de verme parada tan cerca de ella, se le está poniendo bastante roja su cara.

"Quizás deberías irte. Estuvo mal por mi parte traerte aquí." ¿En serio está tratando de deshacerse de mí? Por alguna razón estoy ofendida. Mientras ella me miraba respondo de manera enojada, en este momento sale a luz mi reputación como la perra de la escuela.

"Está bien, como sea no me importa." Salgo con la cabeza en alto.

Solo cuando llego a mi coche me doy cuenta de lo que acaba de pasar. Me molestaba por alguna oscura razón.

POV de Hyejoo

¿Qué diablos acaba de pasar? ¿Por qué reaccionó tan exageradamente? Solo estoy tratando de evitarle un montón de problemas. Mierda, no tengo tiempo para pensar en esto ahora. Mierda, se llevó su auto, voy a llegar tarde si no me apuro ahora mismo. Corro escaleras arriba sin importarme el atuendo que elegí antes. Me pongo unos vaqueros y una sudadera con capucha y salgo corriendo a buscar mi motocicleta. Enciendo un cigarrillo y me voy para arreglar algunos asuntos pendientes.

Estaciono mi motocicleta a la vuelta de la esquina de aquella casa. No me sorprendería que al final de la noche mi motocicleta sea involucrada en una pelea de borrachos idiotas, o incluso en una mía. Reviso mi teléfono antes de caminar hacia la puerta principal. Mierda, llego 30 minutos tarde. Tengo tres llamadas perdidas, esto no es bueno. Toco la puerta pero me doy cuenta de que nadie me escuchará por encima del sonido de la música. Pruebo suerte y giro la manija. Afortunadamente la han dejado abierta. Al entrar, el olor a sustancias y tabaco me golpea de inmediato. Agarro una cerveza a un lado y subo las escaleras sabiendo que es donde él espera que vaya.

Mientras subo las escaleras, tengo que esquivar a las parejas que se besuquean por el pasillo. Mientras lo busco por las habitaciones, empiezo a perder la esperanza de que haya aparecido. Me doy la vuelta para buscar abajo cuando lo veo en el baño. El típico chico del centro de la ciudad ni siquiera se molesta en cerrar la puerta. Entro dándome cuenta que no tiene sentido actuar tímida. Gira la cabeza hacia mí y sonríe, sin hacer ningún esfuerzo por terminar más rápido. Mientras espero, lo miro. Es un chico bastante guapo en general si te fijas más allá de los piercings y los tatuajes.

"Debes ser Hyejoo". Dice cuando finalmente termina.

"Esa soy yo." Le digo sonriéndole.

"Eres más bonita de lo que dijeron". Sus ojos me miran de arriba abajo, puedo sentir sus intensiones.

"Estoy aquí por negocios, no por placer". Digo apartándome de su camino mientras intenta poner su brazo alrededor de mi cintura.

"Bueno, entonces busquemos un lugar más privado y terminemos con esto". Asiento y lo sigo fuera del baño.

Ahí afuera, la fiesta todavía estaba en pleno apogeo. Los pasillos estaban llenos de más parejas que antes.

Busca en su bolsillo la llave de la puerta de la oficina. Ni siquiera había pensado antes en quién era el dueño esta casa. Después de entrar en la oficina, quedó claro que era su casa. La habitación estaba llena de imágenes sentimentales de su infancia.

"Si te conectas a esa computadora de allí y obtienes esos documentos, conseguiré tu dinero de inmediato". Dice antes de salir de la habitación.

Hago lo que dice y saco los documentos necesarios.

Cuando regresa, lleva una bolsa llena hasta el borde. Se acerca a la computadora y verifica que esté todo allí antes de entregar el dinero. Tan pronto como está en mis manos y lo he comprobado, me doy la vuelta y me retiro de su oficina.

Fuera de la habitación, noto que la fiesta parece estar decayendo. Solo cuando reviso mi teléfono me doy cuenta de por qué. Son las 5 am. Mierda. Prácticamente salgo corriendo de la casa apurada por llegar a casa y tratar de dormir un poco antes de tener que despertarme a las 8 am para ir a la escuela.

Cuando me acerco a mi motocicleta, veo a algunos imbéciles merodeando cerca de ella. Demasiado cerca a mí parecer. No tenía tiempo para involucrarme en una pelea, así que solo los ignoré, encendí la motocicleta y salgo lo más rápido posible. Antes incluso de que pueda doblar la esquina, los mismos imbéciles me empujan provocando que cayera de la motocicleta. Estaba lista para mostrarles a estos idiotas con quién se habían metido. Pero antes de que tenga la oportunidad de ponerme de pie, ya habían escapado. Cobardes.