Sólo porque nos queremos

El último concierto

Narra Malú:
A veces, miramos al miedo a lo ojos y no sabemos qué decirle, escuchamos su fuerte rugir mientras las piernas tiemblan y poco a poco nos vamos haciendo diminutos frente a él, esperando que sacuda todo nuestro mundo hasta dejarlo irreconocible.
Así me siento justo antes de empezar un concierto en el que lo doy todo, pero este será muy diferente, ya estaré cerrando la mayor etapa de mi vida, la más cansada, la más agobiante, la más dolorosa y a la vez la más bonita, la más mágica, la más única... la que me ha conseguido hacer libre y a la vez esclava de mi.

Sol: Malú quedan cinco minutos para empezar, (a través del espejo vi como entraba en el camerino) ¿Como van esos nervios? ¿Estás segura de lo que vas hacer?
-: En está profesión nunca puedes estar seguro de algo, así que la respuesta es no, no estoy nada segura, pero quiero y necesito irme un tiempo. (me di la vuelta para mirarla directamente a los ojos)

Se podía ver fácilmente en su cara, el deseo de que cambiase mis intenciones y el miedo a que no lo hiciese. Lo que ella no sabe, es que antes de decírselo, ya llevaba meses dándole vueltas a esto y esperando el momento adecuado para hacerlo. No le he dicho a nadie que mi salud no está en el mejor momento para que siga llevando este ritmo, y sí, sé que si doy este gran paso hacia una nueva vida, estaría dejando a mucha gente a su suerte en la calle, incluida a mi gran amiga y manager, Sol.

-: Os voy a echar muchísimo de menos... (sonreí para quitarle tensión al asunto) ¿Qué voy hacer en mi tiempo libre sin poder planear nuevas cosas? Si es que llevo más de la mitad de mi vida haciendo esto, ya se me ha olvidado como llevar una vida normal.
Sol: ¿Qué voy hacer yo sin tener una jefa como tú? Una jefa y una amiga... una muy buena amiga. (vi como dejaba escapar unas lágrimas y mi corazón se encogió)
-: Venga Sol, anímate anda, vamos a disfrutar de este concierto, tenemos que vivirlo de la mejor manera. (la estreché entre mis brazos y aproveché por un momento para dejar de ser esa persona fuerte e indestructible)
Sol: Sí, es verdad jefa, aún nos quedan por delante unas horas intensas. (miró su reloj y luego me miró a mi) Tienes que salir ya, es la hora.

Abrió despacio la puerta del camerino y entraron todos mis fantasmas pre-concierto, si antes ya estaba muy nerviosa, ahora había olvidado hasta mi nombre. Salí detrás de Sol, escuchando sus pisadas fuertes por el largo pasillo, de lejos ya se podía oír a mi gente reclamarme, no sé quién tenía más ganas, si ellos de mi o yo de ellos, les debo todos estos años maravillosos.
Atravesé otra puerta, esta vez yo sola, y subí con valentía a mi lugar favorito, el escenario. Los aplausos y gritos al verme aparecer dan años de vida, pero sentía un gran nudo en el estómago que iba a conseguir hacerme llorar antes del final y entonces, ya sabrían que algo no va bien.

-: ¡Buenas noches Madrid! ¡Es un honor estar aquí una vez más! (Escuché como todos se revolucionaban antes las primeras palabras) ¡Espero que disfrutéis como niños esta noche, haré todo lo posible! ¡Os adoro!

Todas las luces se apagaron y en cada rincón de silencio se colaron los primeros acordes de guitarra eléctrica. Cerré los ojos dejándome llevar y empecé a pronunciar la letra, dejé que todo lo que me había guardado durante meses, saliese junto a ellos, que cantaban al unísono conmigo. [...]

Se estaba terminando la última canción del repertorio, la voz cada vez me salía más quebrada, así que me vi obligada a animar al público a cantar lo que yo ya no podía. Toda la banda estaba nerviosa y algún que otro fallo se pudo apreciar, pero es lo normal, lo raro sería que no ocurriese. Volvieron apagar todas las luces y juntos, disfrutamos de los últimos aplausos.

-: Mi gente... (en ese momento todos supieron que ya me había venido abajo) esta noche tengo una mala noticia... para todos vosotros, para los que estáis... y para los que... habéis estado durante años. (Cogí el aire que me empezaba a faltar, mi hermano se acercó hasta ponerse a mi altura, consiguiendo que el resto del escenario hiciese lo mismo) Esto no es una despedida de gira, es una despedida para siempre. Este concierto, que espero que hayáis disfrutado muchísimo, es el último; Ese disco que salió hace unos meses, es el último; Las entrevistas a las que habéis acudido estos días para verme, son las últimas...