- ¿Desde cuándo lo sabías? - preguntó ella mientras estábamos en el sofá de su apartamento, viendo series. Yo, con una cerveza en una mano y acariciando su pelo con la otra. - ¿Saber qué? - pregunté un poco confuso, pues no estábamos conversando, solo observábamos la televisión. Ella se acomodó mejor para poder verme el rostro. - ¿Cuando supiste que querías estar conmigo? - sonreí porque esa pregunta me transportó a esa época donde la conocí por primera vez, a sus 16 años. Siempre persiguiéndome por todo el programa. - Siempre lo supe - le dije sinceramente mientras tenía mi vista en sus ojos claros, podía ver cómo el rojo se empezaba a asomar por sus mejillas. Gentilmente las acaricié y le di un corto beso en estas. Ella sonrió y se volvió a acomodar para seguir viendo nuestra serie.