El reino mágico, aquel lugar en el cual tu valor como persona se rige según tu poder mágico y jerarquía, nació un niño el cual no podría llegar a poseer de aquella bendición, un niño al cual los dioses lo abandonaron y apartaron su luz, un ser que no tenía magia. Regro, un beta que toda su vida había sido marginado por su debilidad, encontró consuelo en ese pequeño ser humano, ese bebé tan frágil que era considerado inútil para la sociedad así como él mismo. Entonces tomó la decisión de nunca abandonarle, permanecer junto a él y protegerle, brindarle el calor y amor que se le fue arrebatado por ser una aberración para los demás.