Un día terminó y otro comenzó siendo el verdadero infierno, ¿qué sucedió? Nadie lo sabe, o no quieren saberlo. Estaba solo en ese mundo, hasta que los conocí a ellos, mis mejores amigos. Dos años junto con ellos fue suficiente para quererlos como hermanos, protegernos entre nosotros. Estábamos escapando de nuestro destino.