¿Por qué los chicos no se enamoran de las chicas tristes? ¿Por qué hay que ser una completa estúpida o acaso una puta para que te hagan caso? ¿Por qué deprimirse porque no les agradas a las personas? ¿Por qué hay que preocuparse por la manera en que se ve tu panza o en la gordura de tus brazos? ¿Por qué desear estar muerta a las tres de la mañana? ¿Por qué sentirte como una pelota de mierda cuando solo tienes unos kilos demás? ¿Por qué llorar hasta dormirte? ¿Por qué sentir más apoyo en una canción que en una persona? ¿Por qué sentir que si te vas, nadie te extrañaría? ¿Por qué sentirte fuera de lugar en tu propia familia? ¿Por qué pensar que le das igual a todos los que te rodean? ¿Por qué no sentirte suficiente para nadie? ¿Por qué sentirte inútil cuando solo tienes catorce y toda una vida por delante? ¿Por qué sentir que estás ahí para todos, pero nadie está para ti? ¿Mucho dolor para tan poca edad, no? Creo que los adultos de ahora nunca lo entenderán. Nunca nadie se pondría en tus zapatos para dedicarse a comprenderte. Quizás esto me esté pasando a mí, y a otro millón de chicos y chicas por ahí. Me siento tan vacía que desearía evitar el amor a toda costa, pero eso no lo decido yo, ni nadie. Soy un maldito desastre, y esta es mi adolescencia.