Solo lo miraba y creía que esa amistad pero su corazón gritaba amor con todas sus fuerzas, después de descubrir que sus manos eran tan calidad no quiso soltarlas nunca. Los ¨..te amo.. se utilizaban casi a diario pero después de estremecer su cuerpo y endulzar sus labios por solo 10 minutos bajo el mejor atardecer de la vida, el prefirió el silencio y esa fue la forma mas cobarde de decir adiós.