Hola, mi nombre no es Prudence. 
Pero no es tan importante quién soy como qué es lo que hago, qué marca pienso dejar en sus corazones; y lo que hago es crear fantasía. 
Vivo en un mundo dentro de mi cabeza que no me abandona y que aleja a las personas y me crea altas expectativas, no tengo mucho contacto con el mundo exterior. No soy muy simpática ni amigable cuando me conoces, no hago reír a la gente ni me río mucho cuando ellos tratan de agradarme, no hablo por llenar el silencio, no miro a los ojos; sin embargo, si me escuchas, si escuchas mis latidos, mis movimientos y descifras mis miradas, estoy segura de que dejaré una huella en tu vida, porque soy una buena persona, porque tengo mucho que decir, porque tengo mucho que aprender. 
No quisiera abrumarte con la historia de mis penas, quizás tenga momentos obscuros y sé que tu los tienes, estamos juntos en eso; pero hoy visto de blanco aunque llore, hoy me limpio las lágrimas y sigo adelante, hoy quisiera ayudarte a hacer lo mismo y blanco te enseñaré.