Lizzie creció junto a sus abuelos en la
melancólica Folklore Haven, atractiva para
ella desde niña, despertando en sí misma
curiosidad por la nostálgica antigüedad de
la ciudad, convirtiéndose en cantante y en
compositora, entusiasta del teatro. Logró
conseguir una oportunidad para presentar
al público su primera canción escrita a la
edad de 13 años. Desde entonces, en los
festivales ofrecía recitales con su guitarra
acústica, moños decorando en su cabello
castaño y vestuario inspirado en cuentos
míticos.
Con el paso del tiempo formó parte del
teatro en ruinas Exile, interpretando la vida
de las mujeres escritas por la fantasía y
añoranza. En cada cumpleaños tenía una
salida al lago The Lakes, lugar en el que
escribía historias para transformarlas en
nueva música. Se sentaba sobre el césped
descansando la espalda en un árbol, con
su Cardigan para cubrirse del viento frío,
contemplando aquel paisaje de su amada
ciudad esperando por la imaginación e
inspiración para otorgarle vida propia a
sus ideas y experiencias.
Su temperamento suele ser alegre y dulce,
en sus expresiones hay confianza, muestra
interés por las demás personas y siempre
tendrá una amplia sonrisa sobre su rostro.
Una peculiaridad, probablemente distintivo,
es la timidez, es también reservada pero al
terminar el proceso de conectar con otros
es toda una parlanchina, protectora y muy
amorosa joven.