Absurdo

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— — : diálogos.
« » : Pensamientos.

— ¡Esto es una herejía! — exclamaba un hombre entrado en peso, sentado junto al falso rey — No espere más que una rebelión por parte del escuadrón de reconocimiento —

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— ¡Esto es una herejía! — exclamaba un hombre entrado en peso, sentado junto al falso rey — No espere más que una rebelión por parte del escuadrón de reconocimiento —.

Las cosas para la legión no iban nada bien, se habían vuelto poderosos, más de lo que nunca fueron. Con la creación de nuevas armas por parte de la mayor científica de entre las tres ciudades, la organización y mente maestra del actual comandante y las imparables habilidades del hombre mas fuerte de la humanidad los habían colocado en una posición de respeto frente al pueblo, y aquello no hizo mas que despertar el temor en los que se encontraban a la cabeza dentro del muro Sina. 

Falsos rumores se habían esparcido por cada uno de los rincones de la muralla mas interna, difamaciones, mentiras, desprestigios e infamias de todo tipo que dejaban a la legión con una reputación por el suelo, pero afortunadamente, aún no había llegado a ser un secreto a voces. Sólo los altos rangos y nobles poderosos manejaban aquella información, la cual, no tardó en llegar a los oídos de un preocupado comandante que no les dejaría salirse con la suya.

«Si quieren una rebelión, una rebelión tendrán..» Susurró Erwin Smith mientras se acomodaba el oscuro abrigo que le cubría y se dirigía a paso lento por las calles, con un único destino en mente, mientras su cabeza maquinaba creando el plan perfecto.

» Susurró Erwin Smith mientras se acomodaba el oscuro abrigo que le cubría y se dirigía a paso lento por las calles, con un único destino en mente, mientras su cabeza maquinaba creando el plan perfecto

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— ¡Teniente por favor tenga cuidado! — se escuchó el grito de la voz de un hombre seguido por lo que pareció ser una pequeña explosión.

Un extraño humo de color verdoso comenzó a emanar por las ventanas de la residencia a la que el comandante acababa de llegar — Menuda bienvenida, Hanji — mencionó con una sonrisa ladina a la mujer que escapaba desde el interior con una expresión desconcertada, como si estuviese buscando algo, o quizás, a alguien.

— ¡Hey Erwin! no esperaba verte hoy — rápidamente se acercó hacia el sujeto que la esperaba a unos pasos de la puerta — ¿De casualidad has visto a Moblit por acá? El humo de la bengala me hizo perderle completamente de vista — rió casualmente mientras rascaba su cien con un dedo.

Una misión absurda [LeviHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora