diecinueve

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abrazo grupal:

después de ganar un juego contra el equipo de nekoma se soltó la tormenta.

¡ganamos, kageyama, ganamos! – gritó el pelinaranja, a la vez que pegaba brincos de felicidad.

– ¡en tu cara ken- nekoma! – contestó el pelinegro, chocando manos con el mayor, en su cara una sonrisa genuina.

de fondo se podía ver a nishinoya y asahi festejando también, haciendo una especia de "baile" de victoria. más que nada era el menor.

– ¡no festejen sin mí! ¡yo soy fundamental! – gritó tanaka cuando notó a su mejor amigo bailando con asahi, rápido uniéndoseles.

en cuanto la palabra "festejo" fue escuchada por los demás, todos corrieron a abrazarse, en especial los que habían estado viendo desde fuera.

al notar la avalancha que se venía, tsukishima solo reaccionó en jalar a yamaguchi, alejandolo del caos.

– no me pasará nada, tsukki... – argumentó el menor, riéndose levemente por la vista que tenía de sus amigos hechos bola en un abrazo.

– no pienso arriesgarme. – respondió el rubio, su brazo aun rodeando los hombros del pecoso.

única excepciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora