Capítulo 10

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Hoy es el día, el día en el que seré presentado como mortífago al señor te-... Voldemort. Supongo que ya puedo llamarle así, ¿O no? No lo sé... Estoy tan nervioso...
- Draco hijo, ¿Estás preparado?
- S- si...
- ¿Narcissa?
- Si. Ya es la hora.
Después de un largo viaje, llegamos a una lúgubre mansión que no da muy buena espina. Llamamos al timbre.
- ¿Contraseña? - Dice una voz femenina.
- Lágrima de bruja - Responde padre, algo nervioso.
Suena una especie de timbre y una gran puerta se abre.
- ¡Los Malfoy! ¡Os estábamos esperando! - Dice una chica de pelo rizado y negro.
- ¡Bellatrix! Oh, ¡Cuanto tiempo! - Dice madre, dándole dos besos.
De pronto, me mira.
- ¿Draco? Pero bueno... Ja, ja, ja...
- Eh... Ehm... Encantado.
- Bueno, entremos. El nos está esperando.
Vamos caminando por unos tristes y oscuros pasillos, hasta llegar a una gran sala con una mesa en el centro rodeada por sillas. En un extremo de la mesa está... Voldemort, con la cara pálida, y... Sin nariz. Hay mucho jaleo y está todo el mundo hablando, de pronto.
- ¡Sentaos! ¡Mis queridos invitados! Demos comienzo a la reunión.
- Creo que ya nos conocemos todos, ¿No?
Todo el mundo ríe.
- Eh- Eh- eh-. Hoy tenemos una excepción, ¡Un nuevo miembro!
Me mira.
- Draco, ¿No es así?
- Eh... S- si.
- ¡Bienvenido! Ja, ja, ja, ja...
Una pequeña risa y ovación común se levanta por la sala.
- Bueno ya están echas las presentaciones. Comencemos pues...

Yo, DracoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora