Capítulo XVIII

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--En resumen, me dijo que ella no tiene nada que ver con lo que te hicieron, por otro lado recuerda que se dio cuenta que la chica de cabellos castaños que dirigía el juego se veía demasiado nerviosa después de todo lo que ocurrió...

Bien...solo había dos chicas que dirigían el juego.

La morena y...Leslie, pero si estaba diciendo cabello castaño eso dejaba descartada a la morena, lo que quería decir que...

-¡No!

--Estás bien, Anne?

-Leslie no puede estar involucrada en esto, ella es mi mejor amiga...-dije tragando saliva de solo imaginar que ello pudiera ser cierto

--Leslie...la del campamento?-consultó

-Si...

Mi mente estaba en blanco.

¿Por qué si confiaba en que Leslie jamás haría algo así, no me sentía completamente aliviada?

--No me parecía alguien de fiar

Me enojé.

-¿Y acaso tú si lo eres?-ataqué

Agrandó los ojos sorprendido, pero no refutó.

--Solo digo mi opinión Anne, aquí nadie está acusando a nadie y si quieres encontrar al culpable debes ser objetiva- soltó serio

-Estoy siendo objetiva

--No lo estás siendo y lo sabes

Aparté la mirada.

-Como sea...por qué razón debería confiar en Kate?- cuestioné

--No hay razón para que confíes en ella, pero si queremos reducir la lista deberíamos al menos tacharla momentáneamente, ella también mencionó siete nombres de la lista que afirma no están involucrados

Fruncí el ceño.

-Qué lo afirmé es suficiente para que le creas?-dije con desdén

--En ningún momento he dicho que ellos son completamente inocentes, solo te sugiero que por ahora los separemos de la lista y comencemos a interrogar a los restantes, sino obtenemos nada podemos continuar con ellos

Una vez más Aiden tenía razón.

-De acuerdo-dije sin protestar

Se quedó algo sorprendido ante mi actitud.
Bueno hasta yo estaba sorprendida.

--¿Tienes la lista?-preguntó

Tomé el papel doblado que se encontraba en uno de mis bolsillos y se lo extendí.

--Genial!-dijo sonriente

Agarró un lapicero y comenzó a tachar algunos nombres, luego de algunos segundos la lista se había reducido a diez nombres.

--Listo!

Alcé una ceja en su dirección.

--Ahora podemos continuar con estos cuatro: Danielle, John, Amber y Leo

-¿Alguna razón en especial?-pregunté

--Por lo que sé los cuatro siempre paran juntos y eso nos serviría para acabar más rápido con las personas de la lista

Asentí.

-¿Y sabes dónde podemos encontrarlos?

--Lo sé-aseguró- ahora mismo estás libre? Te puedo llevar a ellos si deseas

-Bien, vamos.

Durante el trayecto del carro, no sabía a dónde mirar por alguna razón me sentía incómoda, ¿Cuántas chicas habrían estado aquí antes que yo? Y ni quería imaginar lo que todo lo que debe haber pasado en este carro.

Beso a ciegasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora