Invisible [Shinomiya y tu]

✨New Year✨

«𝑄𝑢𝑖𝑒𝑟𝑜 𝑢𝑛 𝑏𝑒𝑏𝑒»

ADVERTENCIA: Capitulo largo(500 palabras por día de retraso), es un fragmento o momento que no influye en el próximo capítulo más como contenido extra, sin más aquí les dejo su relleno.

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❁•—•❄︎❀ 𝐼𝑛𝑣𝑖𝑠𝑖𝑏𝑙𝑒 ❀❄︎•—•❁

— Hayato — con una mirada sería llena de determinación buscas la mirada de tu expectante novio para decir tres palabras que forman una fuerte petición — quiero un bebé.

— ¿que?

✨𝙴𝚜𝚎 𝚖𝚒𝚜𝚖𝚘 𝚍𝚒́𝚊 𝚎𝚗 𝚕𝚊 𝚖𝚊𝚗̃𝚊𝚗𝚊.✨

   Desde el balcon de tu departamento admiras las noticias mientras la suave música relaja tus nervios, el suave olor a chocolate caliente llega hasta tus narices haciendote juntar tus párpados para disfrutar del aroma.

   La mano de tu novio se posó sobre tu hombro, con cariño se sentó en el sillón cercano para admirar el frío de la mañana, al ser el último día del año estabas dispuesta a pasarla sola, pero el castaño tenía otros planes, no quería dejarte sola en una fecha tan importante, sus padres se ofrecieron a salir más en la tarde y dejarles la noche para ambos.

— te ves hermosa — susurra cerca de tu oído de forma carrasposa pero sexy, alborotando algunas de tus tantas neuronas.

— ¿por qué ese cambio de voz? — con tu sonrisa sincera tomas entre tus dedos la taza de color azul.

— no se de que hablas~ — con una sonrisa junta sus párpados para inclinar su cuerpo hacia al frente — mi amor.

— ya sabes, cambiaste la voz a una sexy pero dulce — con un poco de vergüenza ocultas tu rostro detrás de tu taza para sentir la risa del castaño — no me digas que le pediste más concejos a Shima — con miedo observa los movimientos del joven.

— no, no, no, no, no — con un fuerte sonrojo retrocede un poco para sentarse en el sillón — bueno si — suelta nervioso sin mirarte.

— te amo — con una sonrisa sorbete as el chocolate caliente para sentir un pequeño copo de nieve sobre tu nariz lo que te hace estornudar — no me gusta esta fecha.

— ve el lado bueno, si te da frío te podré abrazar fuerte — el castaño se sienta sonriente para sacar de la mesa una galleta de chocolate.

   Dudativa sientes el calor subir hasta tus mejillas para alzar la vista con vergüenza — o puedes dormir conmigo.

— o puedo dormir contigo — repite alegre para levantarse de golpe besando tu frente — aunque mi madre se volverá loca si se entera.

— No me lo recuerdes, cuando tú padre le ofreció pasear paaa darnos privacidad su mirada me quería cinco metros bajo suelo — comentas nerviosa para morder tu labio inferior preocupada.

— tranquila, ya se acostumbrará — con dulzura sujeta tus mejillas con ambas manos obligando a conectar sus miradas — no te sientas mal — su mirada mostraba preocupación.