1.1- I like you- OhmFluke- Finalizada

Especial de Navidad

-¡Mamá Fluke me está ganando!
-Qué bueno.
-¡Ayúdame!
El castaño dejó escapar una risa burlesca.- Tú me retaste.

Ohm llevaba viendo a su hermanito y su novio luchar a muerte en uno de los varios juegos de pelea que tenían en biblioteca. Hwa Hwa se negaba a participar en su competencia, era pésima en ello. El castaño estaba celoso, no estaba recibiendo nada de atención de su pareja ¿Por qué? Su precioso mayor había llegado a primera hora de la mañana por petición de su madre y la famosa cena de navidad que había decido hacer por sí misma.

-Simplemente ríndete Captain.- se mofó Fluke al ganar aun teniendo tres vidas.
-Una más.

Cuando su madre por fin dejó ir a su chico, Captain no dejó espacio para robarlo. Terminaron sentados en la sala jugando desde ya tres horas. Ohm estaba muy molesto por ello, tan molesto que solo los observaba sin decir palabra. Tuvo la intención de ir a la casa de Kao y rogarle a White que distrajera a su hermano. El único sobre Fluke que podría hacer a su hermanito olvidarse de los demás.

-Ohm.- la voz de Hwa Hwa lo distrajo de su miseria.- ¿Puedes llevarme al centro comercial?
-No.
-¡Ohm!- su sorpresa era por la negación inmediata.- Eres tan malo.
-Trae las llaves.

Se acercó a su pequeño mayor y trató de hablarle pero un grito por parte del menor al otro lado de la alfombra hizo que se detuviera. Resopló y caminaron a la entrada. Según su hermana las compras que debía hacer eran realmente de emergencia, no había previsto que Fluke llegaría a pasar las fiestas a su casa y luego de verificar que entre los regalos había uno con su nombre la conciencia comenzaba a pesarle.

-¿Qué le gusta a Fluke?
“El sexo”.- quiso responder pero no podía hacerle eso a su hermana.- Las motocicletas.

Como si el recuerdo hubiese dado una idea sus ojos brillaron y lo arrastró hasta el otro lado del centro comercial. Las personas desaparecían poco a poco y Ohm sentía una gran necesidad de regresar a casa y no tener que soportar el frio. La tienda en la que su hermana había desaparecido realmente le interesó. Un local donde personalizaban artículos de motociclistas. Habló con él joven de la caja y a pesar de claramente coquetear con ella su hermano mayor estaba fuera de sí.

-¿Crees que le guste?
-Va a encantarle.- acarició el cabello de la linda chica.- Aunque pudiste regarle algo más económico ¿No crees?
Sus mejillas se pintaron de un tierno color rojo.- No quiero que vea mal mi regalo.
El joven alto la rodeó por los hombros.- Bien, algo menos vistoso estaba bien.

Ignorando completamente a su hermano la jovencita siguió su camino al automóvil. Ohm solo pudo sonreír ante el arrebato de vergüenza de la pequeña Hwa Hwa, aunque no lo dijese, el mayor le agradaba. En varias ocasiones la encontró hablando con él en la cocina de postres o robando comida sin que se diese cuenta. Adorable era lo que la definía para con sus ojos.

Llegaron a casa y todo estaba en silencio. Los gritos de Captain ya no atacaban el ambiente, la risa de Fluke no adornaba el silencio. La esperanza creció en su corazón pensando que podría pasar por fin tiempo con su novio. Quería recordarles a todos que si iba de visita era para él. Toda felicidad se desplomó al encontrarlo revisando el horno con su madre hablando de tantos temas que seguramente el mayor no iba a ser capaz de recordar.

-¿Y qué piensas?
-Debería hacerlo.- la voz del castaño era suave y concentrada.
-¡Oh!- una sonrisa brillante de parte de su madre.- ¿Puedes hacerme un favor cariño?
“No”.- Seguramente si respondía con la verdad su madre lo golpearía.- Claro.
-Necesito que lleves un postre a casa de los Nopparat.
-¿A Kao?
Asintió con mucho orgullo.- Le pedí a Captain que lo hiciera y accedió rápidamente.
Frunció el entrecejo.
-Fue a su casa pero olvidó por completo llevarse los postres y ya no regresó por ellos.
-Bien.