Moon

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Salí de la cama de un salto, metí en la mochila lo que creía que era necesario, estaba un poco
desubicada ya que Moon no me había dicho nada de lo que necesitaba llevar, iba a buscar
en Google lo que era necesario para una acampada, pero mi madre me llamó desde el piso de abajo para que fuera a desayunar.

En cuanto terminé, alguien llamó a la puerta, la abrí, y ahí estaba la chica más guapa que había visto en mi vida y yo despeinada con un pijama
de Hello Kitty.

- Hola, osito, ¿quieres que pase y te ayudo a preparar la mochila?

- No me llames osito, ya tengo demasiado con que me lo llame mi madre, pero si, pasa.

Ella esperó en la puerta de mi habitación hasta que yo me acabara de vestir. Cuando ya estaba lista, la deje pasar y preparamos mi mochila
entre risas.

- Bueno, ya está, nos tenemos que ir ya, o se nos va a hacer tarde.

- ¿Cómo lo sabes? ni siquiera has mirado el reloj.

- No me hace falta, venga que nos esperan.

Salimos de mi casa casi corriendo, sin despedirme de mis padres como es debido.

Fuimos hasta una placita que estaba en medio del pueblo, junto un parque donde jugaban los niños pequeños. Allí estaban los amigos de Moon, lo deduje por sus grandes mochilas.
Había una chica, ella tenía el pelo oscuro, en cuanto nos acercamos más pude notar que tenía algunos rasgos asiáticos, vestía bastante
bien y parecía una chica seria. Moon me dijo que ella se llamaba Zoe.

Al lado de ella, un chico, no paraba de reírse. Tenía el pelo como el de mi actor favorito, Timothée Chalamet, pero en rubio, su flequillo tenía una mecha azul, como el color de sus
ojos. Su nombre era Cameron.

Y por último un chico de pelo marrón, tenía ojos del mismo color, sin duda era el que hacía reír al chico de la mecha azul. Este chico era Raúl.

- Ey, por fin, ya habéis llegado, pensaba que al final no te la traerías.

- Zoe, ya te dije que la iba a traer. Mich, no le hagas caso siempre es así con todo el mundo.

No me lo podía creer, cómo recibe así a alguien que ni conoce. No me había dicho nada directamente a mi, pero sus miradas asesinas me valen como prueba de que me odia sin
conocerme.

- Encantada de conocerte a ti tambien, Zoe, ah si tenes algo entre los dientes.

Se quedó con los ojos abiertos como platos, y las mejillas coloradas. Los demás evitaban reírse por si Zoe los asesinaba. Raúl rápidamente intentó cambiar de tema.

- Ejem… Bueno no sé si te lo ha dicho Moon, yo soy Raúl, y él es Cam.

- Si, ya me lo había dicho, estoy muy contenta de conoceros.

Las cosas, a pesar de todo, parecía que marchaban bien.

Fuimos hasta el coche. Metimos todo el equipaje y nos pusimos cómodos, ya que según Cam sería un viaje largo.

Raúl era el conductor, era el único que tenía dieciocho y con el carnet.

Zoe insistió en sentarse delante. Dijo que era por que no le gustaban los asientos de atrás, pero se perfectamente que lo que pasaba era que no quería estar cerca de mi.

Yo me senté en el asiento del medio. Moon y Cam estaban a mis dos lados, yo quería estar en el lado de la ventana, pero no podía decir nada, aún por encima que me invitaban.

No pasó mucho tiempo y tanto Moon como Zoe se habían quedado dormidas.

Cam, aburrido, empezó a preguntarme cosas y dar tema de conversación.

- Bueno, ¿Cómo conociste a Moon?, ella nos habló mucho de ti pero no nos dijo cómo os conocisteis.

- Pues, tuve un accidente mientras hablaba con ella en una pista de baloncesto, después de eso me vino a ver al hospital, y bueno ahora
somos amigas.

- De todas las formas de las que os podríais haber conocido esa la verdad que no me la esperaba.

- Ya, parece una historia de amor de esas que lee mi madre.

- Justo, historia de amor, eso pensaba yo.

- No, a ver, no quise decir historia de amor…

- Pero te gusta ¿no?

- Si, bueno, no, agh no lo se...

Y tan oportuno como siempre Alex me llama.

- Cógelo, igual es importante.

- No, él es mi ex, ayer corté con el por Moon.

- Oh, pues en ese caso…

Rápidamente cogió mi teléfono, le dio al botón verde y lo puso en altavoz.

- NO CAM-

- Michelle, tenemos que hablar, por favor, se que no decías lo de ayer en serio, te necesito.

- Hola, soy el novio de Mich, ella te ha dejado, déjala en paz o te juro que yo y mis colegas vamos a por ti tío, alejate de ella.

- P-Perdón, no la volveré a llamar, chao.

Alex colgó con mucho miedo, estoy segura de que no me volverá a llamar.
- Gracias, nunca pensé escuchar a Alex con tanto miedo la verdad, cuando quiera intimidar a alguien te llamaré, esto se te da bien.

- Bueno, lo de hacer de chico hetero cabreado siempre se me dio bien.

Estallamos en una carcajada, a la que Raúl desde el volante se unió, ya ni nos acordabamos que él estaba ahí.

- Venga, Cam, no alardees tanto.

- Alardeo por que es verdad y lo sabes.

- Bueno, yo paso de discutir contigo, a parte esta es tu canción.

Parecía que entre los dos chicos habia quimica, obviamente no dije nada.

Raúl subió el volumen de la canción, a petición de Cameron, la canción era “Maniac” de Conan Gray.

Él se puso a cantar a todo pulmón mientras hacía de diva y bailaba. Raúl y yo decidimos unirnos, cosa que hizo que las chicas se despertaran y se unieran también.