Hasta Que Nos Conocimos. (En edición)

1° Esa noche

Todos creen que si algo pasa es por algo, que si conoces a alguien es por que algo tendrá que ver en tu vida, yo no creía eso, hasta que llego esa noche que cambió mi vida por completo.

6 de Agosto del 2019.-CALANTHA PERSÉFONE MILLER JONES APURATE QUE VAMOS TARDE!-ese fue el grito de mi hermano mayor por casi 6 años.

Mis padres tienen una seria obsesión con la mitología griega, pero bueno que esperaba de dos Historiadores y documentalistas reconocidos del mundo. Tienen 4 hijos los mayores los mellizos Hestia y Hades de 28 años, Eros de 22 casi 23 años y por último Calantha Perséfone de 17 osea yo.

-ya voy Eros!-le dije cerrando la puerta de mi cuarto y en el espejo que hay en pasillo checo mi vestimenta y veo que estoy perfecta.

-al fin niña, tardas mucho-dijo Eros cuando bajé las escaleras al recibidor donde me estaba esperando desde hace media hora.

-no sé que tanto me presionas pero bueno vámonos ya, que tenemos que ir a recoger el regalo de Nicolás-le dije a mi hermano caminando a la puerta de entrada de la casa.

Como casi siempre no teníamos de quien despedirnos ya que nuestros padres se encuentran en un viaje de investigación y nuestros hermanos mayores viven en Vancouver. Nosotros vivimos en un pequeño pueblo llamado Beaufort en Carolina del Sur.

-has hablado con papá y mamá?-pregunta mi hermano cuando estábamos en el coche.

-a excepción de mi cumpleaños hace dos semanas no, supongo que están ocupados-le dije a mi hermano mientras le mandaba un mensaje a mi novio.

-enserio sigues con ese tipo?-pregunto mi hermano cuando descubrió a quien le mandaba mensaje.

-si Eros, es mi novio y lo amo, y no pienso terminar con el solo por que tu crees que me engaña con su mejor amiga-dije fastidiada de esa conversación, siempre era lo mismo con Eros cuando de mi novio se trataba.

-bueno ya no te diré nada, solo disfruta de la fiesta esta noche-me dijo mi hermano.Se detuvo donde íbamos a recoger el regalo de su amigo de la infancia Nicolás. Ambos bajamos y entramos al local.

-Buenas noches en que puedo servirles?-pregunto la chica tras el mostrador haciéndole ojitos a mi hermano.

-venimos por el pedido de Calantha Miller-dije a la chica mientras de mi bolso sacaba mi tarjeta de crédito para pagar lo que me faltaba del regalo.

-en un momento se los traigo-dijo ella para darse la vuelta y buscar. Esperamos 10 minutos cuando la chica llegó con la canasta que había pedido para el cumpleaños de Nicolás.

-son 350 dólares pero dio 200 de anticipo así que son 150 dólares-dijo la chica y le extendí la tarjeta de crédito. Después de pagar mi hermano tomó la canasta y salimos del local para guardar la canasta en el asiento trasero del coche.

-y pensar que el verano está llegando a su final-dijo mi hermano.

-aun falta más de un mes para entrar a clases hermano-le dije riendo. Seguimos nuestro camino para llegar al casa de la fiesta.

Una vez que llegamos ambos bajamos, mi hermano toma la canasta y caminamos juntos a la puerta de la casa. Toco el timbre y Nicolás abre la puerta. Nos deja pasar a la sala de estar y donde están varios chicos y se ve que en el jardín estan los demás.

-Llegaron los dioses griegos!!-dijo emocionado Nicolás señalandonos.

-toma un pequeño detalle que Calantha quiso traer-dijo mi hermano pasando la canasta a Nicolás.

-muchas gracias pequeña Calantha, si fuera por tu hermano me hubiera traído puros condones-dijo Nicolás y yo rei.

-tambien vienen unos condones, ya sabes no queremos niños por aquí-dije para reír.