04.

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–¿Que halas?.

Miro a su lado soprendido, había un gato pero no era Nadando. Suspiro, siguiendo su camino hacia la sala donde tenía su siguiente clase.

–No lo sé... Cleo que no ela el momento de habe'lo encontlao....

–Y tienes lazon.... Aun debes mejolalte... ¿Todavia duele?...–Dijo Ramen, caminando a paso lento junto a el. A ambos le dolía hablar sobre la situación.

–Si... No impolta que tanto haga.... Siemple e'ta ahí el dolol....–Suspiro, apretando su mano en su pecho.

–¿N-nadando no hace nada pala ayudalte?.

–Na.... Nadando se fue hace do' año'.... El también me dejó...–Miro al suelo, sintiendo las ganas de llorar nuevamente.

–N-no lo sabía..... Peldón.....–Ambos se detuvieron para mirarse fijamente. Yun se sentó en el suelo abriendo sus brazos para recibir al gatito entre sus brazos, así, ambos daban el amor que les faltaba en ellos.–Solo.... Solo no te lindas.... Nuevamente...... Los gatos de tus padles están pleocupados....

–¿Hablas con ellos?.–Dijo sorprendido.

–Si.... Pelo lala ve'.... Y pue' eso, dicen que tus padles tienen miedo otla ve'..... –Miro aquellos ojos que de apoco van perdiendo la vida, con ojeras bajo suyo..... Era doloroso ver a su yo humano así.... Le dolía mucho...

–Los complendo en leadidad.... Yo también tengo miedo....–Acarició la cabecita de Ramen, recordando esas épocas.... Temiendo volver a pasar por aquello.

–Yun..... Te quielo mucho, pol favol cuídate..... No te lindas así de fácil.....–Ramen se acercó para dejarle un beso en su mejilla para mirarlo detenidamente, todo a su alrededor comenzo a nublarse. Dándole paso a la cruda realidad, miro a su alrededor notando como estaba acostado en una camilla de la enfermería, a su lado estaba como siempre Isa quien se veía preocupada.

–Yun..... Que bueno que despiertas....–Se acercó para tomarle la mano con cariño. Solo pudo observar el techo cansado, las palabras de Ramen lo hicieron reflexionar.... Si el es su otra mitad entonces sabe todo lo que ha echo..... Hasta aquello que Isa no sabe.–Te encontraron perdiendo la conciencia de apoco..... Eras como un zombi hasta que te derrumbaste en brazos de Moco....

Asintió a todo lo que escuchaba, no tenía ganas de hablar. Lo suponía, no era normal hablar con un gato... La enfermera llegó, diciendo que podía descansar ahí. Aceptó gustosamente, hasta que se aburrió, así salió y se fue hacia el patio. Pues al parecer aún quedaba minutos para terminar el último receso. Encontró a su grupo debajo de un árbol, así que fue con ellos con una sonrisa.

–¡Yun! ¿Como te sientes?.–Le preguntaron una vez que se sentó junto a ellos.

–De pana, solo se me bajo la plesion.–Bromeó riéndose, contagiando a los demás. Pues así era todos los días, haciendo reír a los demás a pesar de estar sufriendo por dentro.

–Toma, no quiero que te pase otra vez. –Recibió un dulce por parte de su amiga. Comenzó a comérselo escuchando la conversación pero sin opinar, realmente no le importaba mucho lo que hablaban hasta que escucho el nombre de Freddy, su enemigo a muerte. Siempre creyéndose superior a al, desde que llegó a la Facultad ¡Ni siquiera había hecho algo para que lo tratara tan mal! Seguramente era porque era chino.... Siempre lo molestaba diciendo que se había comido a su gato y por eso nunca estába, eso era lo peor, el sabia lo que pasaba y aún así lo molestaba de tal manera.

–Freddy estaba emocionado, dice que su novio viene hoy a la Universidad.–Comentaba uno de ellos con fastidio.

–Y todavía tiene el descaro de decirle novio, no sé la necesidad. Todos sabemos que le rompieron por haber preferido a alguien más.–Tonet le siguió, mirando hacia la puerta de la cafetería. Hizo una señal con sus cejas para que todos vieran hacia allá, justamente iba saliendo con una gran sonrisa el rey de Roma, dirigiéndose a los pasillos más allá. Agarro de los hombros a alguien, sonriendo aún más grande.

Todos miraban atentos, debían de enterarse de todo. ¿Habrian volvido de verdad? Según las amistades del gallego pues si, pero su actitud decía otra cosa. Igual, de todos modos sabían que Freddy tenía una pequeña obsesión con el ser extraño. Un grupo se le acercó a la pareja, seguramente lo estaba presentando. Pero había algo extraño, el alumno del otro lugar parecía algo tenso, no podía decir con claridad pues estaban muy lejos para ver.

–Ojalá se caiga de la escalera. Me cae mal.

Sonríe, soltando una risa nasal. Volvió a mirar al grupo sacando un puñado de skittles, llevándose a la boca. De pronto, el desconocido ladea la cabeza notando que lo conocía. Abrió sus ojos con sorpresa al descubrir los responsables de todo su dolor, aquel Cataño de ojos verdes, noto la mirada del grupo. Descubriendo que entre ellos estaba su destinado. Lo quedó mirando algo preocupado. Unieron miradas notando nuevamente aquella “chispa”.

Comenzó a toser, desesperadamente. Apartó rápidamente la mirada con aquel cataño, para preocuparse de su vida. Isa comenzó a golpear su espalda preocupada.

–¡Pero hombre! ¡Se más cuidadoso!.–Se recuperó, tomando aire. Cuando una idea muy loca se le cruzó.

–Isa peldoname.–Se giro para ver mejor a su amiga.

–¿Perdona-....?

Unos labios impidieron que siguiera hablando. Abrió sus ojos sorprendida por el beso que impidió terminar su frase. No se movió, esta impactada. Sus otros amigos hicieron sonidos de sorpresa para luego comenzar a burlarse. Yun se separó de apoco, algo avergonzado, no la miro, si no, a su costado disimuladamente. Y había logrado lo que quería, la cara de dolor en aquel sujeto le hizo sentir un poco bien. Ya no sería el único que sufriría. Lo vio partirse algo desanimado con Freddy hasta perderlo de vista.

–¡Vaya! ¡¿Desde cuando lo estas ocultando Yun?!.–Tonet lo comenzó a molestar. Solo le lanzo una mirada de fastidio para luego tomar la mano de su amiga con algo de inseguridad.

–Isa, peldoname, no ela mi intención hacel algo así.... No quielo que malintelpletes la situación....–Comenzo a explicar en voz baja, para que solamente ella escuchará.–Me gu'ta sel tu amigo y solo eso... E'to... Dios.... No puedo deci'lo aquí....

Suspiro, tomando su mochila para levantarse con su cara desanimada. Del bolso saco su teléfono bajo la atenta mirada del grupo.

–No me e'toy sintiendo bien.... En uno' dia' no' vemo'....–Marco el número de su padre, sonriendo algo débil a los chicos.–Isa... Si e' posible.... ¿Puede' venil ma' talde a casa? Debo decilte algo...–Le aviso a la chica, quien seguía mirándolo sorprendido. Se despido con la mano comenzando a caminar hacia la salida. Habló con su padre y le explicó la situación, en casa lo estarían esperando.

𝙲𝚊𝚝 𝚍𝚎𝚜𝚝𝚒𝚗𝚎𝚍-𝐘𝐮𝐧𝐚𝐧𝐝𝐨.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora