JAY PARK "MI ENEMIGO" (NUEVA)

De vuelta a la realidad

Han pasado 6 meses desde que no se nada de Jay Park, las cosas sucedieron demasiado rápido y también todo cambio.

Durante seis meses, Jay jamás volvió a llamarme y yo tampoco lo hice porque tenía miedo, SimonD me pidió no volver a hablar con Jay, de hecho todos los chicos lo hicieron, incluso Woonjae creía que eso era lo mejor, el más molesto fue Dante, por suerte no perdí la autoridad que tenía pero Dante ya no escúchaba mis planes o ideas, ahora solo se dirigía a Ian, quien tardó unos meses en hablarme. Todo lo demás, los negocios, volvió a la normalidad a diferencia de que no hemos tenido ni un solo enfrentamiento con los hijos de Belial.

Desde aquel día, los primeros meses fueron difíciles porque no soy lo suficiente fuerte y madura para esto, con el tiempo fui sanando heridas y gracias a los chicos fue que supere todo, convertí todos mis recuerdos en una simple anécdota; Ian fue la primer persona que ame y Jay Park la segunda, dicen que el tercero es el correcto y tal vez algún día llegue ese tercero a mi vida o tal vez eso del amor no es para mí.

Estos últimos días hemos tenido bastante trabajo, aún estamos recuperándonos de las pérdidas que tuvimos gracias a Dong-hyuk, mi trabajo es esperar a que Ian y Dean nos den un plan porque como dije, Dante ya no me consideraba en lo absoluto. Teníamos una nueva "misión", necesitábamos ser más fuertes y tener más aliados, y ya habíamos puesto los ojos en alguien, le llamaban Zico, un gangster que se estaba haciendo un tanto famoso en la ciudad y con fama de mujeriego. Dante veía potencial en el, creía que podía servirnos solo faltaba convencerlo que trabajar para nosotros. Dean me dió la orden, era sencillo ya lo había hecho algunas veces, seducir al chico y días después Ian le haría una oferta, asi había más probabilidad de que aceptará; tal vez muchos piensan que este método no funciona, pero así llegó MrWoo al equipo, tenía mucho potencial y  queríamos que trabajará para nosotros así que usamos ese mismo plan, pero no  esperabamos que él terminaría siendo parte del equipo y convirtiéndose en familia.

Esta noche debía buscar a Zico, no era una misión de pelea así que debía intentar verme bien, tal vez un vestido llamativo o algo que simplemente no me hiciera ver tan yo y ese aspecto rudo. Busque un vestido corto color rojo, cabello suelto y algo de maquillaje; no acostumbraba verme así pero no podía quejarme, me sentía bonita. Subí a mi auto y salí de casa, esperaba un mensaje de Dean, quien estaba rastreando a Zico  aunque no era difícil, sabíamos que le gustaba andar en bares y antros bebiendo, fumando y en compañía de algunas chicas, solo debíamos saber en qué lugar se encontraba esa noche, para mí mala suerte Dean me dijo que estaba en De Luxe, si los chicos supieran que era el lugar donde veía a Jay, definitivamente no me habrían dejado ir ahí; el problema no era el lugar ni los recuerdos que tenía en el, el problema era que ese lugar es el favorito de Jay y había tal vez un 80% en probabilidad de verlo esa noche y no me sentía preparada para eso, no sabiendo que la última vez que lo ví, le rogué que se quedará conmigo, pero si las cosas salían bien tal vez no lo vería está noche.

Llegué a De Luxe, baje del auto y entre al bar, como siempre había cientos de personas unas conocidas otras no, había drogas, alcohol baile y peleas, me di algunas vueltas buscando mi objetivo el cual no tarde en encontrar, Zico estaba junto a unos tres chicos platicando y riendo mientras bebían, tenía que planear como acercarme sin que hubiera la posibilidad de ser rechazada, es decir, había cientos de chicas bastante guapas en este lugar, y no lo niego el chico no estaba nada mal, a decir verdad era bastante guapo y se veía muy elegante, así que estaba por demás decir que había chicas que intentarían estar esta noche con él.

Zico están acercándose a la barra junto a los otros chicos, me apresure para ponerme a su lado y pedir cualquier cosa en la barra, pedí un Whisky algo que en mi vida había probado, mi vicio era el tabaco, no el alcohol y en cuanto tome en pequeño sorbo de aquel vaso mi cara de disgusto puedo decir que se notó a metros al menos  Zico, lo había notado, soltó una pequeña risa por mi acto y ahí estaba mi oportunidad, le di una sonrisa y le hice una señal hacia la pista, la cual entendió rápido y nos dirigimos a bailar; la  música estaba a todo volumen, sonaba una canción bastante sensual y pegajosa, comenzamos a bailar mientras nos mirábamos.