El problema no es que me quieres

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Eran las 8:30 y yo aún no llegaba a la fortaleza, opte por llamar a Jay y explicarle. Tome mi celular, escuché el tono de llamada hasta que contestó.

Jay: hola nena.

Tn: Dónde estás?

Jay: Aún en casa, recién voy de salida.

Tn: Necesito algo de tiempo.

Jay: Todo está bien?

Tn: Sí, solo tuve que hacer algunas cosas lejos, había algo de tráfico y recién estoy en camino.

Jay: Podemos cancelar la cita si quieres.

Tn: No, solo necesito algunos minutos más, no envíes a nadie por mi, prometo llegar sola.

Jay: Estás segura?

Tn: Sí

Jay: Toma el tiempo que necesite cariño, estaré esperándote.

Tn: Gracias.

Termine la llamada y volví a acelerar; finalmente llegué a la fortaleza, corrí directo a la habitación, me di una ducha rápida de nuevo, intenté arreglarme lo más rápido posible, me puse el vestido y los tacones que Jay había dejado en la caja, me tomo alrededor de unos 40 minutos hacer todo eso, salí del cuarto y pedí a uno de los hombres que me llevará al lugar, quedaba como a 20 minutos de la fortaleza, solo llegaría 30 minutos después de la hora acordada, para mí no era difícil, pues había demasiada adrenalina pero para Jay, sabía que sería aburrido simplemente sentarse y esperar por mi.

Finalmente llegué, le dije al hombre que me trajo que volviera a casa pues no lo necesitaría más. Entre directo al lugar, seguía demasiado agitaba. Mire a todas las mesas hasta que lo encontré, bebiendo vino y mirando el celular, sin que me viera camine detrás de él y lo abrace, tontamente quería sorprenderlo, le di un beso en la mejilla y le solté para sentarme en la silla a un lado de él.

Jay: Te quedó bastante bien el vestido

Tn: Tienes buenos gustos.

Jay: Esque todo se ve bien en ti cariño.

Tn: Tu no te quedas atrás -Jay usaba un traje que le sentaba bastante bien-

Jay:En que estabas nena?

Tn: Nada importante, solo trabajo.

Jay: Segura? Tu cara dice que estas preocupada por algo.

Tn: Cariño, solo son cosas del trabajo, estoy mejor ahora que tengo un tiempo libre contigo.

No dejaba de pensar en las fotografías, pero no quería arruinar la cita con Jay,  quería decirselo, pero sabía que eso arruinaría el momento.

Jay no volvió a preguntar más, llamó a un mesero y comenzo la cita, cenamos, tomamos algo de vino, con moderación, no quería terminar ebria esta noche; platicamos de todo, aun seguiamos conociendonos, nos reíamos de algunos chistes y anécdotas. Olvidabamos todo cuando estabamos juntos, estabamos teniendo una cita en un lugar público, sin seguridad alguna, sabiendo que, si algun policia entraba por esa puerta, estabamos acabados simplemente por lo que somos, pero nada de eso tenía importancia, solo eramos nosotros dos.

La noche transcurrió en risas y halagos por parte de los dos, había una banda de Jazz, tocando de fondo, la mayoría en el lugar  eran parejas, la música era romantica y muchos la disfrutaban bailando.  Por petición de Jay, nos atrevimos a bailar en  medio de la pista; tenía sus manos en mi cintura y las mías en su cuello, Jay era un más alto que yo, asi que mi cabeza se acomodaba bien entre su pecho. En  ese momento me di cuenta que estaba perdida, quería a Jay más de lo que imaginaba. Me volvía una adolescente enamorada, lo quería y no solamente para una noche o por capricho; lo quería a mi lado,  quería despertar a su lado, quería todas las cosas lindas con él.

JAY PARK "MI ENEMIGO" (NUEVA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora