JAY PARK "MI ENEMIGO" (NUEVA)

Más y más peleas.

Desperté con la poca luz que lograba entrar entre las cortinas de la habitación, cambié de posición en la cama para mirar a Jay y abrazarlo, pero encontré que no estaba en cama. Enredé la sabana en mi cuerpo y baje a la cocina, pero tampoco lo encontré, revise la ducha, la sala, la piscina y no había rastro de él, me asomé por la ventana y el auto no estaba.

Tn: Mierda Jay, espero no sea lo que estoy pensando.

Subí de nuevo a la habitación, busque los jeans que llevaba la noche anterior para vestirme y tome una camiseta de Jay. Baje de nuevo y fui a la cochera para tomar uno de sus autos. Subí a uno y salí de casa, en el camino tome mi celular e intenté llamarlo unas cuantas veces, pero en ninguna me cogía la llamada. Me molesté un poco por no obtener respuesta, pero no encontraba otra cosa que hacer, mi celular comenzó a vibrar y pensé que sería el devolviendo la llamada pero simplemente era Loco.

Tn: ¿Que pasa?

Loco: ¿Dónde carajos estas?

Tn: Dormí fuera de casa, le avise a Ian.

Loco: Ven ahora mismo, tu novio está aquí y las cosas se van a poner muy mal.

Tn: Estoy en camino, no dejes que Jay haga una estupidez, por favor.

Loco: Lo intentaré, pero no te prometo nada.

Tn: Estaré ahí pronto, solo cuídalo. 

Colgué la llamada y aceleré lo más que pude, sabía que Jay no iba a quedarse quieto y a pesar de todo, mi amor por Dante aun era tan grande que no quería que le sucediera algo y mucho menos si Jay era el culpable. Llegue a la fortaleza, baje corriendo del auto con ayuda de uno de nuestros trabajadores que estaba en la entrada y que me dijo dónde estaba Jay.

X: Las cosas estas muy tensas allá.

Tn: Dame un arma.

X: Ten cuidado, Simon nos prohibió entrar así que no hay nadie protegiéndolos -habló extendiéndome su arma-.

Corrí a la bodega Loco, Simon y Dean, estaban a los lados de Jay intentando calmarlo, pero nadie se atrevía a tocarlo, de nuevo Ian estaba en medio impidiendo una masacre y Mr.Woo estaba junto a Dante como última opción para protegerlo, a pesar de la situación era obvio que todos estaban dispuestos a defender a Dante, y en eso Jay tenía una desventaja. Por su parte él tenía un arma apuntando hacia Ian, quien en realidad solo intentaba evitar que le dispararán a Dante.

Tn: Baja el arma Jay. -hable sin obtener respuesta- Jay, baja la maldita arma joder.

Jay: Ese hijo de puta se atrevió a tocarte.

Ian: Esta vez te entiendo Park, pero no ganas nada con esto.

Tn: Jay, por favor.

Jay: Es mi mujer y no voy a dejar que nadie la toque.

Simon: Park, tienes que calmarte, piensa las consecuencias de esto.

Jay: Me importa un carajo, por Tn haría lo que sea.

Tn: Entonces baja el arma, no hagas esto más difícil para mi

Dante: Le pedí que se quedará quieta pero es necia.

Jay: Eso no es pretexto para que la tocaras, esto no era parte del maldito acuerdo, tú me pediste protegerla cuando tú eres el maldito animal que la lastimó.... de ti es que quien debía protegerla.

Tn: Por favor Jay, baja el arma estas apuntándole a Ian.

Jay: Puede quitarse y hacerme el favor de dejarme apuntarle a Dante.