El principió de algo eterno

Capítulo Séptimo

El aire del bosque me tranquiliza y estoy emocionado de ver a Hinata y contarle sobre todo esto.
Hinata esta donde la otra vez que nos vimos, mostraba una gran sonrisa al momento en que nuestros ojos se encontraron.
-Naruto-kun.- dijo mientras se acerca a mi.
- Hinata ¿llegue tarde?.- le pregunte dulcemente.
- no.- dijo mientras me miraba con una mezcla de ansiedad y ternura.- como te fue en tu entrenamiento?
- fue genial.- dije sin pensarlo.- Los hermanos Shimuzu utilizaron la vieja técnica del rey demonio de las sombras.- comente mientras tomaba su mano y la besaba.- y a ti Hinata como te ha ido?
- me...me fue... Bien, un poco...aburrido.- dijo torpemente
- mi día hubiera sido aburrido si no te hubiera encontrado.- al decir eso note cómo se sonroja bruscamente, reí al ver su reacción.- Hinata...¿que piensas sobre mi relación con los aldeanos?
- creo que....
-¿crees que?.- pregunte un poco nervioso.
- creó que no estas interactuando con los aldeanos como se debe.... Tu siempre quisiste que todos te reconocieran.-su voz me hizo reflexiónar, yo siempre quise esto, en senté en el piso y al cabo de unos segundos Hinata hizo lo mismo.
- es solo que no se como reaccionar...me molesta el hecho de que me siento molesto con ellos.
- creó que solo debes dejarte llevar.- dijo mientras toma mi mano.- y dejar todo en el pasado.- guardo silencio unos segundos.- todos cometemos errores Naruto-kun; y cuando no puedes remediarlos lo mejor seria que los olvidaras.
- tienes razón.- dije en un susurro, Hináta recargo su cabeza en mi hombro, me gire a verla y me estaba viendo con la misma mirada: ansias con ternura, pude sentir su respiración con la mía y sin pensarlo ambos nos besamos, perdiendonos de la realidad.