Enemigos en la misma cama || KOOKMIN

8.

— Ustedes dos son un caso perdido. — riñe el director a dos jóvenes molestos entre ellos.

— Fue Jimin quién empezó, hay muchos testigos que pueden hablar a mi favor.— se defendió Jungkook retando con la mirada a Jimin.

Ambos habían sido alejados de los demás por el director para reñirles y hablar con ellos.

— No seas mentiroso, te crecerá la nariz como pinocho por mentir. Sabes muy bien que tu empezastes esto.— lo miró con tanto resentimiento.— No te hagas el inocente que no te queda Jeon Jungkook.— gritó Jimin alterado asustando al director que cansado del tema tomó del brazo a los dos jóvenes.

Entre quejidos y ante la mirada de muchos curiosos los llevó al bosque. Jimin y Jungkook no entendían nada cuando llegaron al lago.— Necesitan disciplina chicos. Asi que como castigo, buscarán las piedras más redondas que hay en el lago; entre los dos, mínimo saquen unas treinta piedras, me avisan cuando terminen y espero que en este tiempo puedan conversar de sus problemas.— dicho esto el director los dejó solos.

— Esas piedras estan muy al hondo.— se quejó Jimin imaginando la eternidad que pasarían ahí.

— Todo es tu culpa enano.— vociferó Jungkook enojado para agacharse y sacarse los zapatos.

Jimin iba a responderle con un insulto pero se quedó callado porque tenía que cumplir un castigo, haciendo la misma acción que Jungkook se sacó los zapatos para entrar al lago. Sus primeros minutos y apenas encontraron una piedra redonda, se sumergían una y otra vez para buscar, Jimin nadando se chocó con Jungkook golpeandose frente con frente.

— Dolió.— murmuró Jimin sobándose la zona afectada.

El alto sintió preocupación, él no había sentido tanto dolor pero al parecer Jimin sí, sabía que era delicado con la piel y hasta exagerado, es por eso que tomandolo de la cintura lo acercó a su cuerpo para dejar besitos en su frente como si eso ayudara. Y una vez más, Jimin se dejó hacer apoyandose sumiso en Jungkook, lo que empezó como caricias por parte del alto para aliviar el dolor continuó con un beso lleno de pasión, ambos juntaron los labios gimiendo y luchando con sus lenguas. Las prendas desaparecen de sus cuerpos para lanzarlas por algún lado, la verdad ni se inmutaron dónde cayó la ropa de ambos por estar llenos de deseo de poseerse, Jimin se trepó en Jungkook enrollando sus piernas en la cadera de su supuesto enemigo porque se le fué el resentimiento en ese momento al ser preso de la pasión.

— Lo quieres tanto como yo lo quiero, ¿Verdad? — susurró Jungkook a centímetros de los labios de Jimin.

El bajo asintió. Eso fue el permiso para continuar, se besaron otra vez empezando ahora sí a entregarse, al estar en el lago fue más fácil preparar la entrada de Jimin y en menos de tres minutos Jungkook empujó con su polla, sujetando la cintura del otro para dar embestidas placenteras para ambos, gemian y jadeaban sintiendo el orgasmo cerca.

— ¡Jungkook! — Jimin dió un grito arañando la espalda del alto al llegar a un orgasmo que lo dejó satisfecho y temblando.

Unas embestidas más bastaron y Jungkook llegó a su climax derramándose en la entrada de Jimin, ahí ambos se dieron cuenta que no usaron condón y no es como les preocupara un embarazo, Jimin era un hombre y no podía quedar en cinta. Solo les sorprendió que se dejaron llevar tanto como para hacerlo sin protección de por medio.

Una vez que ambos descansaron se separaron con una sonrísa.

— Reconozco que me has hecho caer otra vez por tí, soy un sumiso contigo pero igual te odio.— aseguró Jimin riéndose para alejarse y buscar su ropa.

Pero...

No había nada, no había rastros de las prendas de alguno y eso puso nervioso a Jimin.

¿Con qué se cubrirían la desnudez ahora?

Ambos pensaban en como solucionar el problema en el que se metieron aunque valió la pena por el buen sexo que tuvieron.

— Tenemos que salir desnudos del lago y mentir que nos robaron la ropa, unos diez ladrones por lo menos.— dió su idea Jungkook, idea que hizo reir a Jimin.

— Eres un tonto.— golpeó su brazo divertido.

Jungkook lo apegó de nuevo a él para besarlo y hubieran dado el segundo asalto de sexo si no hubieran aparecido dos jóvenes románticos de la mano que se sorprendieron al ver a dos desnudos en el lago.

— ¡Jimin! — gritaron Hoseok y Namjoon al darse cuenta que era su amigo con Jungkook.

Eso fue como un milagro para los jóvenes desnudos, lejos de tener vergüenza se acercaron hasta la orilla tapando con las manos sus partes íntimas.

— Hoseok corre y trae algo de ropa para los dos, nos robaron unos diez ladrones. — mintió Jimin con la excusa inventada por Jungkook.

Obviamente Hoseok no creyó en nada.

— Ajam.. y esos ladrones los obligaron a besarse en el lago.— con una mirada acusadora Hoseok los enfrentó negando con la cabeza. Namjoon a su lado reía por la situación en la que se encontraba el par.

— Solo trae la ropa y sirve para algo.— habló Jungkook rodando los ojos.

— Enseguida regresamos.— dijo Hoseok para irse con Namjoon.

Mientras Jimin y Jungkook quedan en silencio o así estaban hasta que se ríen mirándose.

— Caímos tan bajo, siendo enemigos y teniendo sexo para después odiarnos otra vez.— dice Jimin.

O eso creía él.

— Yo no te odio.— confesó Jungkook con sinceridad pero antes que Jimin dijera algo aparecen sus amigos con algunas prendas.

Se vistieron rápidamente antes que alguien más los viera desnudos.

— ¿Dónde dejaron su ropa? — preguntó Hoseok de curioso.

Se encogieron de hombros pues no tenian ni idea donde lo lanzaron al momento de dejarse llevar por el deseo. Jimin pide ayuda a sus amigos para sacar las piedras y ellos aceptaron más por Jimin que por Jungkook, en media hora todos sacaron las treinta piedras redondas.

— Bien, vamos a decirle al director que acabamos. — habló Jimin. Se despidió de sus amigos que se alejaron para que el director no los viera ahí y sospechara de la ayuda.

Fueron por el director y regresaron al lago, recibieron la aprobación del mayor pero grande fue su sorpresa porque les pidió lanzar las piedras de nuevo al lago.

— Tanto trabajo para eso.— se quejó Jungkook enojado.

— Eso es para que aprendan, me hacen pasar por situaciones asi donde los reporto pero vuelven a hacerlo. Más vale que no se repita algo similar como lo de hace rato o será peor el castigo.— advirtió el director ante de irse.

Obedeciendo lanzaron las piedras al lago.

— Bueno, me iré primero.— se despide Jimin pero Jungkook lo sostuvo del brazo.

— Espera... Quiero hablar contigo, esto debí pedirte hace mucho pero de cobarde no lo hice, vamos a nuestra cabaña que llegó la hora que aclaremos algunas cosas pasadas.— suplicó Jungkook nervioso porque es la primera vez que tendrian una charla larga sobre su situacion de enemigos.

Jimin asintió siendo guiado de la mano hasta la cabaña donde por fin hablarían.

Después de tantos años.