Extrañas emociones [Completa] [En edición]

Capítulo 16

Damien lleva rato conduciendo, no he ido muchas veces a su departamento como yo quisiera, pero sé que ya dejamos atrás el camino a él, nos dirigimos a las afueras de la ciudad, entramos en la avenida Catalunya y seguimos hasta llegar a la avenida Papa Luna, hasta desviarnos a la carretera Valencia, después ya no supe a por donde se metió, cuando me di cuenta ya entrabamos en una desviación y unos kilómetros más adelante hay otra entrada, esta es privada, es un bonita entrada, a unos metros hay un portón, se abre y podemos entrar, seguimos unos 2 kilómetros más y se ve una hermosa casa, es bastante grande, pero no llega a ser una mansión o quizá si lo sea, es lo de menos, lo que sé es que es hermosa, él estaciona, baja, llega hasta mi puerta la abre y me tiende la mano para ayudarme a bajar, aun me siento débil, bajo y nos dirigimos a la entrada, entramos, el mayordomo nos recibe.

-Señor Gothman, que bueno que este de vuelta-. Me pregunto cuánto tiempo hace que él no viene.

-Gracias Charles, ¿Hay alguien más en casa?-. No logro comprender a que se refiere con esa pregunta.

-No señor, su hermana regreso al internado la semana pasada, y su madre aún sigue fuera de la ciudad y no dijo cuándo volvía-. Ahora entiendo.

-¿Necesitan algo?-.

-No Charles estamos bien, puedes retirarte-. Charles se va por el pasillo contrario al que estamos, Damien voltea hacía mí. -Pequeña está es la casa donde crecí, aquí estaremos seguros y nadie interrumpirá lo que tenemos que hablar-. Yo lo veo con preocupación, no alcanzo a entender a qué se refiere con lo que tenemos que hablar, toma mi mano y me guía por los pasillos, llegamos a una puerta corrediza que da a la piscina y el jardín, no nos detenemos ahí, él me sigue guiando. –Este lugar es bonito aunque no tanto como la cascada, pero te gustara, solo por eso me gusta venir aquí de vez en cuando-.

-Dam, este lugar es muy bonito, ya entiendo porque regresas-. Hay un pequeño lago con una muelle, un árbol que está en el centro del lago y hace que este lugar sea mágico.

-Lo sé, es muy bonito, como verás me gusta la naturaleza, aunque este es artificial-. Lo quedo viendo directamente a los ojos un poco sorprendida, porque el lugar se ve tan natural.

-No tienes que decirlo, ya había dado por hecho que te gusta ña naturaleza y esto se ve muy natural, es bellísimo-. Rodeé su cuello con mis brazos y lo atraje hacía mí, lo bese tiernamente.

-Rous, tengo que contarte algo, es muy importante-. Me tense un poco, pero él me abrazo con tanta ternura y me relaje.

-¿Dime qué ocurre?, me asustas-. En mi rostro se puede ver la preocupación, un poco de confusión y también intriga, por saber qué es lo que quiere decirme, él se separa un momento de mí, pone sus manos en mis hombros, respira profundo y luego pregunta.

-Rous, ¿Verdad que esta nota no es la primera que recibes?-. Yo lo veo sorprendida, sé bien que no le puedo mentir, él lo notaría, pero ni siquiera tengo la fuerza, ni las ganas de mentirle, así que opto por decirle la verdad.

-No, no es la primera, pero pensé que era una broma de mal gusto o que se habían equivocado, ya veo que no, Damien, tengo miedo, no sé lo que está pasando, no entiendo nada-.

-A mí también me han llegado cartas o notas, como sea tienen el mismo fin, he tratado de investigar qué es lo que está pasando y quien es la persona que las manda, pero no logro encontrar nada, de hecho el día que te conocí, más bien que te volví a ver, iba a verme con una persona que supuestamente sabía algo, pero cuando llegue no había nadie, subí al apartamento que me había dicho y no había nadie, luego baje y fue cuando chocamos y lo demás que sucedió, ¿Sabes?, hay algo que es muy gracioso, antes de verte a los ojos, yo estaba que no me aguantaba ni a mí mismo, estaba molesto, pero al verte, Dios, juro que se me olvido porque había ido hasta ahí...-. En ese momento yo lo veía sonriendo.