Ahora entiendo porque la gente siempre dice que cuando encuentras a la persona indicada el tiempo pasa demasiado rápido, que no te das cuenta hasta que te paras un momento y te pones a pensar en todo lo que has Ahora entiendo porque la gente siempre dice que cuando encuentras a la persona indicada el tiempo pasa demasiado rápido, que no te das cuenta hasta que te paras un momento y te pones a pensar en todo lo que has pasado, en todo aquello que has dejado atrás, las sonrisas, las desgracias, sobre todo esas, te das cuenta que ha valido la pena cada una de esas situaciones, nada más y nada menos que por el siempre hecho de que las has vivido junto a la persona que amas.
-¿Dam?-.
-Si cariño-.
-Ven a la cama, es de madrugada, tienes que levantarte temprano, no es que no lo sea ahora, pero debes descansar-. Dice ella acercándose a mí por detrás y rodeando mi cintura con sus brazos, yo las acepto gustoso, así que tomo una de sus manos y la llevo hasta mis labios y beso tiernamente sus nudillos.
-Lo sé, pero estaba recordando algunas cosas, por alguna razón hoy justamente, me pare a pensar en que sería de mi vida sin ti-. Digo aun dándole la espalda, ella se pone frente a mí y me sonríe como solo ella sabe hacerlo, después hace eso que tanto me vuelve loco, muerde una lado de su labio inferior, es raro, nunca la muerde por fuera, siempre es por dentro, la observo detenidamente, ella lo hace igual conmigo.
-Venga vamos-. Dice tomado mi mano derecha y jalándome en dirección al dormitorio, yo no me muevo.
-Y he llegado a la conclusión de que no tendría una vida si tú no estuvieras en ella, la verdad es que no puedo imaginarme una vida sin ti, un mundo en donde tú no existieras, donde no estuvieras a mi lado, simplemente no existe en mi mente, te amo, como nunca he amado a nadie más, y no me cansare de repetirlo-. Da un suspiro, y me sonríe de nuevo, levanta la mano que tiene libre y acaricia mi mejilla con el dorso de su mano, cierro los ojos al sentir su contacto, su piel es tan suave que la sensación que me produce es indescriptible, vuelvo a abrir los ojos y ella me está observando fijamente, y aun tiene una gran sonrisa.
-Te amo, te amo tanto que ni yo misma puedo explicar lo mucho que lo hago, simplemente no hay una razón lógica que pueda describir esta sensación que siento cada que estoy junto a ti-.
-Dios, pequeña-.
-Deja descansar un poco a Dios, que él te dejara descansar en este momento-. Frunce el ceño un instante, luego dice. –Olvida eso de que te dejará descansar un momento, no suena bien de ninguna forma, ves, ahora ya no sé ni lo que digo, vamos a la cama, y recuérdalo muy bien, no puedes dejarme, ¿Me oyes?-. Río porque sé a lo que se refiere.
-No tienes una idea de cómo me pones cuando hablas así pequeña-.
-Oye ¿A caso te estas burlando de mí?-. Me dice sonriendo, me agacho a su altura y la beso, ella me recibe encantada, como siempre. –Eres mi debilidad-. Vuelve a sonreír maravillada por mis palabras.
-Y tú la mía, sino veme-.
-Me fascinas-.
-Ya lo sé, suelo causar ese efecto, ¿No lo sabias ya?-.
-Por supuesto que sí, pero no me agrada la idea de saber que le puedes agradar a la "gente"-. Le digo haciendo comillas con los dedos en la palabra "gente", sabe bien que me refiero a hombres.
-Vamos amor, nada de celos, sabes que aquí sólo estas tú-. Dice señalando su cabeza, sonrío.
-Sí, pero me pone enfermo solo pensar en que a otros puedas "agradarles"-.
-Te amo tonto, recuérdalo bien TE-A-MO-.
-Y yo a ti-.
Después de esa pequeña conversación ella me toma de la mano y me jala hasta la recamara, una vez ahí, ella utiliza sus encantos de mujer conmigo, y yo sucumbo ante ella, no lo puedo evitar, ella es perfecta para mí, tan delicada, pero a la vez tan fuerte, tan fría pero a la vez tan cálida, tan inteligente, como graciosa, tan dominante como sumisa, es simplemente mi complemento, tengo claro que con solo una mirada, puede hacer que me rinda ante ella, no lo hace, pero estoy completamente seguro de que si lo hiciera, sedería
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Extrañas emociones [Completa] [En edición]
RomanceQue tal sí un día te das cuenta dé que un completo extraño, al que conociste por casualidad, despierta en ti emociones que nunca antes había sentido, que tal sí toda esa nube que te cubre sólo fuera momentáneamente una tormenta y que al vaciarse las...