Capítulo Especial: "Primera vez"La primera vez que conocí a Itadori Yuji fue como un huracán. Como un terremoto. Como un rayo impactando sobre mi.
Pero no era nada romántico, no al principio al menos. Cuando le vi en el campo de su escuela, haciendo un lanzamiento asombroso y siendo adulado por todos, creí que era solo otro chico popular.
Pero no. Cuando corrió a mi lado, como una ráfaga de viento, lo sentí. Su energía. Todo el potencial que había en su interior. Si bien creía que sólo era eso, estaba muy equivocado. Pues el destino tenía otras cosas planeadas para nosotros.Entonces ocurrió nuestro segundo encuentro. Cuando me acerque tranquilamente a él, lo supe. El era mi destinado. Mi cuerpo y mi Omega parecían eufóricos. Aquel lado mío que parecía muerto, despertó cuando le tuve al frente.
El problema consistía en que él no parecía notarlo, tampoco yo estaba lo suficientemente seguro en ese entonces para decirle. La verdad es que no lo habría hecho jamás, me hubiese guardado el secreto hasta la tumba conociéndome.
Yuji estaba devastado. Su abuelo, su único familiar había fallecido. Y aún así, mi insensible yo del pasado parecía querer ignorar todo. A Yuji, a mi mismo y al nuevo nosotros que habría.
Como la persona fría que era (o más fingía ser) continúe hablando sobre mi misión, sobre el jujutsu, la importancia en aquello con aquel chico devastado, que parecía haber perdido una parte de sí mismo.Y así como entré, me fui. Estaba orgulloso de mi. Por ocultar bajo aquella máscara de frialdad mi verdadero estado. Y en cuanto me encontraba fuera de su vista, me apoye contra la pared, las rodillas me temblaban, los dientes castañeaban. Sentía la sangre calentar mi rostro, mientras jadeaba, tratando de aclarar mi mente, todo mientras mi Omega... Esa parte de mi que jamás se manifestó antes, ahora luchaba con intensidad por el control de mi cuerpo. Aquellos instintos de presentarse, de oler, perfumar, y tan sólo... Hundirse en los brazos de mi Alfa. Solo pasar las manos por su hermoso cabello, enterrar la nariz para empalarme en su exquisita fragancia. Tan solo mostrar mi cuello, mostrar mi sumisión....
Estaba aterrado, confundido y horrorizado por los impulsos que me consumían en ese momento.
Por lo que hice lo que siempre hago en situaciones así. Correr.
Nuevamente escapé de mis problemas. Recriminándome mentalmente, recordándome una y otra vez que la misión es lo más importante. Como si fuera un mantra.Y corrí, con el pecho apretado y el corazón latiéndome a mil.
Nuestro tercer encuentro.
Debo confesar que el tercero fue en parte un shock aún más grande que el primero. Fue tan solo unos minutos después de hablar en el hospital.
Cuando me dirigí a su escuela, cuando rastreaba la maldición. Cuando me sentía extrañamente más cómodo y a gusto, como si fuera más normal para mí luchar contra algo inhumano que estar frente a un Alfa de mi misma edad.
Bueno, para un hechicero de jujutsu no es en absoluto extraño, pues se sabe que en su mayoría, somos únicos.Aun así, concentrado en enfrentarme a la maldición que tenía presa a la compañera de mi alfa. Que no me percaté de su presencia.
Entró como un rayo, como un avión estrellándose contra el vidrio, como si volara frente a mi, a la luz de la luna, con los cristales a su alrededor dándole una apariencia etérea. Al igual que un héroe sin capa, saltó como si nada, golpeó a la enorme maldición y tomó a la chica en sus brazos. Todo eso en menos de tres segundos.
Dioses, el chico ni siquiera sudó.En ese momento, me di cuenta de lo extraordinario que es Itadori Yuji.
Pero como era obstinado, y aunque su olor me mareara y su muestra de fuerza y determinación realmente me acelerara el corazón, no me deje vencer por eso.
Decidí demostrarle tanto a él como a mismo quien soy, y para que estoy aquí.
Así, con la mente aún nublada, me enfrenté yo mismo a la maldición. Me creí vencedor por unos segundos, saboreando la victoria y demostrándole al Alfa que puedo valerme por mi mismo. Que a pesar de ser un omega, soy muy superior a él en todo sentido.
Parecía desesperado por demostrar mi grandeza, mi independencia y mi fuerza.
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PECADO || JJK • ItaFushi/SukuFushi
FanficMegumi Fushiguro era un Omega con el novio perfecto. No había mejor Alfa para el que Itadori Yuuji. Y ciertamente no debería desear nada más. Solo que lo hacía, deseaba a otro hombre. Más bien dicho a otro demonio. ᴍᴇɢᴜᴍɪ ғᴜsʜɪɢᴜʀᴏ ᴅᴇsᴇᴀʙᴀ ᴀ sᴜᴋᴜɴᴀ...