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El fin de semana llegó muy rápido y con ello la reunión del trabajo de biología en la casa de Hyunjin. Decir que se encontraba nervioso era poco. Por primera vez en toda su vida iría a casa del pelinegro y de verdad sentía que iba a cagarse encima. Felix lo ayudó a escoger un lindo outfit. No importaba si solo harían un trabajo, el pecoso quería que su hijo se viera bien. Como hacía un poco de frío, vistió con un suéter negro con pequeñas rayas blancas, un jean azul y converse blancas. Era algo simple, pero sin dudas se le veía bien.

Antes de salir de la casa del menor, revisaron el tercer paso. Contacto visual. Hacer contacto visual es un componente crucial de la coquetería y también puede aumentar sus sentimientos de atracción por ti. Míralo a los ojos cuando hables con él y no tengas miedo de mirarlo fijamente aún cuando ambos estén en silencio. Pero ten cuidado, no querrás parecer un psicópata. Recuerda pestañear.

-Tienes ojos grandes y eso lo hacen bonitos, tienes algo a tu favor. Ahora solo tienes que mirarlo así como lo estás haciendo conmigo, recuerda no exagerar y más tu sonrisa, solo lo cautivaras. Mucha suerte, Innie. Te irá bien.

-Gracias, Lix. De verdad no sé que haría sin ti.

-Nada seguro.

Jeongin golpeó levemente el hombro de su amigo y juntos salieron de la casa. El de cabellos naranjas acompañó al contrario en todo el camino para no se sintiera tan nervioso. Así podría distraerlo y no estaría pensando en tonterías por el trayecto. Felix se despidió del menor cuando este tocó el timbre no sin antes volverle a desear suerte.

Hyunjin abrió la puerta de su hogar con un pequeño perrito al lado y dejó pasar al contrario quien ahora era perseguido por el canino curioso de la nueva visita en la casa.

-No sabía que tenías una mascota... ¿Cómo se llama?

-Kkami. Es un travieso la verdad... -el menor rio y siguió dándole caricias al pequeño canino quien solo se dejaba hacer.-¿Vamos a mi habitación?

-Uh, bueno...

Subieron las escaleras no sin antes haberse lavado las manos y entraron a la habitación del mayor. Las paredes eran blancas, la cama estaba en el centro y al lado de ella había una pequeña mesita de noche con una lámpara, su escritorio estaba cerca de la ventana, había una puerta extra que suponía que sería el baño y luego había un ropero metido en la pared. También había como un pequeño sillón azul. En conclusión, era una habitación muy bonita.

El tema de biología que les había tocado era el Sistema Nervioso Central y Periférico. Como no tenían materiales para hacer la maqueta, decidieron avanzar con la exposición. Así se dividían los puntos y ya podían ir aprendiéndola para que salga bien el día de la presentación.

Hyunjin rio al escuchar el estómago del menor rugir aclamando por un poco de comida así que bajó por unas galletas y bebidas dejando al contrario en su habitación.

Grupo chat
3 integrantes

Jeongin
necesito ayuda

Chris
QUÉ HA PASADO

Felix
a quién tengo que
matar

Chris
lix, ya hablamos de
esto...

Jeongin
no puedo mirarle a
los ojos, siento que
me muero

Felix
HOMBRE, NO ES
TAN DIFÍCIL

Chris
imagina que es una
competencia de
miradas. no te
gustaría perder,
verdad?

Jeongin
yo no pierdo, bang

Chris
eso lo veremos

Levantó su vista cuando el celular del mayor comenzó a sonar y no es como si él quisiera haber visto quién era. La pantalla se prendió sola con el nombre de Rosé en ella. Sintió un pequeño malestar en su estómago y no precisamente porque tenía hambre. Obviamente no podía reclamarle nada porque recién comenzaban a hacerse cercanos y es más, ni tenía que hacerlo porque no eran una pareja. Solo podía mirar desde la distancia.

Hyunjin entró a la habitación con una bandeja en manos y la dejó en su escritorio viendo como la pantalla de su teléfono se apagaba. Luego le iba a responder, pero la pelirroja volvió a insistir. Se disculpó con el menor y contestó la llamada.

-¡Hola Hyunjin! Como no respondiste mis mensajes, quería preguntarte si te gustaría salir conmigo más tarde.

Oh, es verdad. No los respondió por estar conversando con el rubio.

-Perdón, no me había dado cuenta y bueno, sobre lo otro... Gracias por invitarme, pero no puedo salir porque estoy haciendo el trabajo de biología con mi pareja.

-Ah... Será otro día entonces, nos vemos el lunes.

Rosé bufó al no conseguir lo que quería y una duda cruzó en su cabeza. ¿Con quién hacía el trabajo? Le pidió a una de sus amigas que le pasara la lista de los nombres y minutos después, Jisoo fue la que respondió.

Yang Jeongin.

Sino se equivocaba, era el mismo chico de la cafetería. Al que Hyunjin había abrazado cariñosamente.

─★ web page ! ˎ´-

¿Por qué nunca antes lo había mirado al hablar a los ojos?

Se había estado perdiendo de mucho estos años. Amaba como brillaban y cuando reía se volvían más pequeños, era simplemente adorable. Sin dudas, Jeongin a partir de ahora en adelante se la pasaría viendo los ojos contrarios. La idea del australiano no había sido tan mala, ayudó bastante.

Por otro lado, ahora Hyunjin era el que quitaba la mirada de vez en cuando. No estaba acostumbrado a que el rubio lo mirara tanto. Tener esos afilados y grandes ojos mirándolo lo ponían ligeramente nervioso.

Parecía que el plan de Jeongin estaba funcionando.

Luego de haber conversado y bromeado un rato mientras comían, continuaron con el trabajo. Dividieron los puntos entre ellos y ahora ya tenían toda la información. Solo les faltaba aprenderla. La maqueta la harían otro día. El trabajo era para dentro de unos meses más así que podían ir consiguiendo los materiales en unas semanas.

-¿Quieres ir a dar una vuelta con Kkami?

-¡Sí! -dijo entusiasmado y Hyunjin podía jurar que el menor era el emoticon que siempre usaba.

El canino era muy tranquilo, no era como otros perros que siempre jalaban cuando sus dueños los paseaban. Kkami caminaba en el centro de la pareja siguiéndoles el paso. Estuvieron rondando por los jardines mientras conversaban de cualquier cosa y luego regresaron al hogar del mayor encontrándose con la madre de este.

-Buenas tardes, señora Hwang.

-Hola cariño. Puedes decirme Sunhee, señora me hace sentir vieja y yo aún estoy muy joven. -dijo riendo y el menor entendió por qué el pelinegro era tan guapo.-Jeongin, ¿verdad? Jin, me dijo que vendrías.

-Uh, sí... Es un gusto.

-¿Te gustaría quedarte a cenar?

Oh, Dios.

¿En serio la madre de Hwang Hyunjin le estaba preguntando eso? Iba a desmayarse ahí mismo.

¿En serio la madre de Hwang Hyunjin le estaba preguntando eso? Iba a desmayarse ahí mismo

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tengan un buen día ♡

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