✔QUE TE ODIE MAS, NO QUIERE DECIR QUE TE AME MENOS || Larry Stylinson||

Parte 16. Visita. (Final)

Parte 16. Visita. (Final) 

Liam, como prometió, arribo a LA a primera hora.

Parecía el hombre más feliz del mundo con esa chaqueta negra y esa sonrisa del tamaño del mundo que se cargaba, los paparazis no tardaron en enterarse y seguirlos todo el día.

Aquel día, Harry le agradeció de verdad que llegara pues tuvo un millón de atenciones, le hizo el desayuno, la comida y la cena, le echo una manta encima cuando se quedo dormido en el sofá tras unas cuantas películas y lo despertó justo a tiempo para la fiesta a la que irían juntos. Si que fue lindo.

Por la noche, antes de regresar a su habitación, Liam miro directo a Harry y le dijo que quitara la cara de tristeza porque ya mañana todo estaría bien. Por alguna razón, aquello lo tranquilizo.

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Exactamente a las seis de la mañana Liam entro, Harry no supo cómo, a la habitación del rizado revolviéndole las sabanas y diciéndole que se levantara de una vez y que encendiera el puto televisor. 

Cuando Harry, lleno de nostalgia y pocas ganas hasta de respirar, hizo lo que su amigo le ordeno, se quedo helado.

 Louis arribo a LA unas muchas horas después de Liam, los paparazis lo aturdieron pero eso fue lo de menos, no venía a verlos a ellos.   

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Los ojos de Harry soltaron unas tímidas lagrimillas cuando Louis cruzo la puerta del hotel, Liam los dejo a solas, porque era el intermediario y la distracción en el hecho publico de que Harry y Louis se verían, lo demás dependía de ellos.

Louis dejo caer la mochila que cargaba en uno de sus hombros, y a paso cauteloso se acerco a Harry. Trago en seco y hablo.

-¿Tu realmente... me odias?—Harry se derritió a la par que sonreía divertido, ¿El chico realmente habia viajado a LA para hacerle aquella pregunta?

-Si—el oji azul bajo la mirada lleno de decepción y frustración a la vez, al parecer había venido en vano. ¿Qué haría sin su rizado de ojos esmeralda? ¿Cómo mierda afrontaría la vida? ¿Quién cuidaría de él? Louis no podía permitirse perder nuevamente al hombre de su vida, iba dispuesto a llorarle, hincarse e incluso humillarse de la manera más baja para que Harry lo perdonara y eso hizo. Se dejo caer de rodillas y cómicamente se abrazo a una de las piernas de Harry, quien sonrió al notar que desde los premios, más o menos una semana había subido un par de kilos. 

-Harry, me estoy muriendo... no sé porque a veces soy tan estúpido o tan inmaduro o tan tonto... yo solo... sé que me has de odiar por todo lo que he hecho pasar, por prometer dejar de drogarme y luego hacerlo, y por decirte que no te necesitaba, eres necesario, y se que me odias y no te culpo porque... 

Harry pensó que ambos ya habían tenido suficiente castigo, y, ¿Quién no se doblegaría a tal escena?

-Claro que te odio.

-Eso... Yo... ¿Que puedo...?— 

-Pero que te odie mas no quiere decir que te ame menos. 

Y como resorte, Louis se levanto besando a Harry con desesperación y este no tardo ni un segundo en corresponderle, se necesitaban. 

Las cosas nunca fueron ni serian fáciles pues siempre se vive con las decisiones que uno toma,  el miedo al rechazo y la aceptación, pero entre dos las penas son menos, claro que habrían mas lagrimas y más sufrimiento además de pruebas más grandes en su relación porque la vida no es un cuento de hadas pero ¡Al diablo el futuro! Ellos tenían algo mas valioso, su presente juntos.

♦♦♦♦♦♦♦♦FIN♦♦♦♦♦♦♦♦

MG.