Uno

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Suena mi alarma nuevamente, creo que lleva mas de media hora sonando, pero aun así no tengo ánimos de levantarme, hoy es mi primer día en un nuevo instituto, supongo que debería decir que estoy emocionada y todo lo demás, pero en realidad esto me parece ya bastante rutinario, pues mi padre trabaja en una compañia de viajes internacionales, lo cual nos ha llevado siempre de un lugar a otro, no es algo que me afecte la verdad, ya que no tengo amigos, creo que una vez tuve uno, pero eso fue antes de saber que no me duraría.

-Monita levantate ya o llegarás atrasada. No creo que quieras pederte tu primer día o ¿sí?- dice mi padre mientras asoma su cabeza por la puerta entreabierta de mi habitación.

-Por supuesto que no.- le digo con tono bastante sarcástico.- Eso es lo menos que quisiera.

Mi padre y yo tenemos un lazo muy fuerte, diría que es como el amigo que nunca pude conseguir.

Mi mamá murió cuando yo era una niña y desde entonces mi papá ha hecho lo posible por darme una estabilidad, él cree que me encanta conocer nuevos lugares y que tengo un millón de amigos por todas las partes en las que hemos vivido, pero la cruda realidad que no sabe, es que yo no tengo a ninguna persona que pueda considerar dentro de la categoría de "amigos", solo simples seres que no tenían ni la mas remota idea de mi existencia, aunque yo conocía hasta sus más íntimos secretos.

Desde que nos mudamos por primera vez y comencé a comprender que las personas son pasajeras, es que me compré un diario, sin embargo, a diferencia de los típicos diarios donde uno escribe sucesos de su vida privada, yo escribo acerca de cosas relacionadas a otras personas, no me malentiendan no soy una cotilla, lo que pasa es que como soy tan introvertida, me es difícil acercarme a la gente, y como no tenía amigos lo único que me quedaba era observar, primero partí con situaciones normales, nada fuera de lo común, pero luego por coincidencias de la vida terminaba en lugares donde se daban las más grandes escenas, dignas de una pelicula, o bien escuchaba por error conversaciones que me dejaban perpleja, como no tenía a nadie a quien recurrir, para quitarme el peso de encima escribía en mi diario, jamás se lo dije a alguien ni siquiera a mi padre, porque no es algo de lo que me sienta orgullosa, pero si ha hecho de mi soledad algo un poco más agradable.

-Ya ya, por esta vez pasaré por alto tu sarcasmo, pero enserio ya levantate, tu celular lleva sonando hace bastante tiempo. No queremos que nuestros vecinos coloquen una queja por ruidos molestos- se burla mi padre acercándose para darme un beso en la frente y luego salir.

Con todo el pesar de mi corazón tengo que hacer un esfuerzo sobrehumano para levantarme.

Busco entre los cajones algo decente que ponerme y me voy a duchar. Cuando ya he terminado de arreglarme me veo una última vez al espejo y con mochila en mano bajo a desayunar. No obstante, es un acto frustrado, pues mi padre me reclama lo atrasada que voy empujandome hacia la puerta, y sin más que un plátano en la mano me dirijo hacia la parada de autobús.
Allí un chico con una capucha negra escucha música con sus audífonos, me dispongo a hacer lo mismo en cuanto veo al bus acercarse, es entonces cuando me pongo nerviosa y como loca empiezo a buscar el dinero para poder pagar sin encontralo. Cuando veo que ya no hay mucho que hacer sin otra alternativa me trago la bilis que intenta salir por mi boca y le hablo al chico.

-Disculpa.- toco su antebrazo para poder captar su atención, lo cual consigo al instante porque se gira en mí dirección y con sus penetrantes ojos azules me mira interrogante.- podrías decirle al chofer que me espere un momento es que no encuentro mi dinero.- mi voz suena rasposa y mi débil intento por no seguir sudando es fallido.

El chico se sacude para que lo suelte y su mirada cambia a una arrogante.

-Tus asuntos no son problema mío.- dice con aires de suficiencia antes de subirse y dejarme parada con un nudo en la garganta y con ganas de matarlo.

Bueno ahora saben que por cosas como estas es que no hablo con las personas.


Estoy muy emocionada!!! Hace siglos no me animaba a escribir :( pero por temas de la universidad lo había dejado de lado, espero les guste y puedan apoyarme en esta nueva historia no saben lo importante que es para mí 💕 Espero actualizar semanalmente o a medida que mis estudios me lo permitan.

Ya saben cualquier comentario, sugerencia o crítica (constructiva) es bienvenida❤

El diario de Emily Donde viven las historias. Descúbrelo ahora