Oneshots e historias cortas sobre Illidan y Maiev. (Y otros)

Toma mis labios

Toma mis labios por Druida del salvaje

Resumen:

Después del beso, Lor'themar Theron y Thalyssra encuentran un lugar más apartado para disfrutar un poco más de tiempo juntos antes de que Azeroth los necesite de nuevo.

Notas:

Esta es una continuación del maravilloso cuento "A Moment in Verse" de Madeleine Roux. ¡Te aconsejo que lo revises antes de leer esto!

https://worldofwarcraft.com/en-us/story/short-story/a-moment-in-verse

Pensé que la historia corta era tan linda y tenía tanta tensión sexual y me sorprendió que nadie hubiera hecho fanfic sobre que paso despues. Entonces decidí hacer algunos. Este no es el tipo de cosas que suelo escribir, así que espero que lo disfruten :)

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El mundo fuera de su beso se había derretido hace muchos minutos. El tiempo se había detenido hasta que ya no parecía existir. Las dudas aún permanecían en el fondo de la mente de Lor'themar. A saber, las palabras del mensajero. ¿Qué podían necesitar con tanta urgencia en Orgrimmar? Tenía la aterradora idea de que tenía que ver con Sylvanas. Había utilizado una clase de magia que ni siquiera Thalyssra había visto.

Thalyssra parecía haber sentido que sus pensamientos se habían desviado de su beso. "¿Hay algo mal?" preguntó, mirándolo por debajo de las pestañas blancas como la nieve.

"Nada podría estar mal mientras estás aquí", dijo. Habían estado abrazados en la terraza durante varios minutos y Lor'themar ahora se dio cuenta de que cualquiera que mirara desde las torres y balcones cercanos podría estar mirándolos. Aunque el tiempo se había detenido hace un momento, ahora no tenían mucho tiempo. Los poetas querrían volver a reunirse y lo necesitaban en Orgrimmar. Sintió una punzada silenciosa de molestia, casi rabia, por ser arrancado de esta hermosa ciudad y mujer tan pronto. Siempre tenía que haber algo.

"¿Vamos a otro lugar?" preguntó Thalyssra, pareciendo leer su mente.

"¿Y dónde tienes en mente, Fir-Thalyssra?"

Ella se rió suavemente y le susurró al oído puntiagudo. "Conozco un área cercana que será mucho más privada".

Su corazón comenzó a acelerarse incluso más rápido que antes. Sintió una punzada dentro de él que fue mucho más bienvenida que la anticipación que había sentido mientras viajaba aquí en el bote. La mano de Thalyssra todavía estaba en su barbilla y él se acurrucó contra ella. "Me gustaria eso."

"Bien", dijo con una sonrisa tirando de las comisuras de sus labios. "Sígueme."

Lor'themar no quería soltar a la hermosa elfa de la noche en sus brazos. Quería vagar por debajo de su cintura, quería besar su cuello y... Probablemente era mejor no ir allí todavía. Eran en público, y él se portaba bien, incluso mientras admiraba la forma en que sus caderas se movían cuando caminaba.

La caminata no duró más de cinco minutos, aunque se sintió como una eternidad. Thalyssra los había llevado a un edificio sin nadie más, probablemente un lugar que usaba para trabajar cuando no quería viajar hacia y desde su propiedad. La habitación estaba decorada con un fastuoso estilo nocturno. Thalyssra corrió detrás de ellos la reluciente cortina de gasa y luego se volvió hacia Lor'themar.

Lor'themar abrió la boca sin saber lo que iba a decir. Sin duda algo para arruinar el momento. Fue una bendición cuando Thalyssra lo interrumpió agarrándolo por los brazos y atrayéndolo hacia ella. Luego se volvieron a besar, esta vez con más fuego que antes. Envolvió sus brazos alrededor de ella como si fueran a separarse en cualquier momento. El tratado de paz se había firmado, pero Azeroth nunca parecía estar fuera de peligro por mucho tiempo. Puede que sean la última oportunidad que tienen en mucho tiempo.