No era la primera vez que Berhot trataba con una bruja, pero esta era diferente, tenía interés en ellos, tal vez y habia encontrado un punto débil en el, ya que su familia lo es todo.
–¿Cual es tu motivo por el cual quieres ayudarnos?– Preguntó.
–No puedo decirlo aquí, estoy siendo perseguida.
–Lo único que quieres es mi protección, soy un cazador de monstruos, no un guardaespaldas.
–Porfavor, se cómo quitar la maldición que tienen.
Al escuchar esas palabras pudo recordar una plática de su padre que escuchó hace mucho tiempo.
«Estoy casi seguro que Gabriel tuvo que ver con esta maldición, pronto mis hijos tendrán una vida tranquila» fueron las últimas palabras que recuerda.
–Antes de correr de aquí me presentaré, mi nombre es Alizon Jones, soy una bruja curandera.
–¿Bruja curandera?– justo al terminar la pregunta, del techo de la iglesia cae una gárgola, Alizon tomó a Berhot y se fueron corriendo.
La gárgola iba justo detrás de ellos, pero Berhot sabía cómo detenerlo, de su chamarra sacó Rosas de sangre, un excelente método para aturdir a los demonios.
Logró detenerlo, la gárgola se retorcía por el olor y Alizon aprovechó para tomar otro camino, después de una corta distancia llegaron a su casa.
Al momento de entrar, se pudo apreciar como el lugar estaba muy ordenado, el suelo limpio, los libros ordenados alfabéticamente y los muebles sin nada de polvo.
–Adelante, estás en tu casa, haz lo que quieras hacer, excepto matarme, jaja, porfavor.
El cazador no confiaba aún en ella, debía de tomar sus precauciones, era su primera vez tratando tan formal a un monstruo.
–¿Por que tienes tanto interés en ayudarnos?.
Alizon tomó un libro y decidió contarle la historia de su familia y de el.
Elizabeth Jones fue una bruja sanadora muy querida en Transilvania, pero un día llego un forastero al pueblo, era Abraham Van Helsing y llegó con el único objetivo de matar a la bruja que se encontraba atormentando Transilvania.
Sabía que no podía esconderse, así que se mostró enfrente del cazador, Van Helsing preparó su pistola, pero una niña interrumpió la ejecución, cayó al suelo desmayada, la bruja tomó a la niña y le dio a oler una poción, después de un momento se despertó y abrazó a Elizabeth.
Abraham no podía creer lo que había visto, después de pensar tomó la decisión de perdonar su vida, Elizabeth estaba muy agradecido con él, Van Helsing decidió proteger el pueblo por un tiempo, a cambio de eso, le dieron un lugar donde descansar y la suficiente comida, pero no todo era perfecto.
Drácula, al ver que todos sus súbditos morían decidió destruir Transilvania, Abraham le pidió ayuda a Elizabeth, ella le debía la vida así que aceptó.
Se habrían pasó matando a los plebeyos del señor oscuro, no era nada fácil considerando con las armas que llevaba Abraham.
Tras llegar con Drácula, aquel cazador luchó contra el señor de las tinieblas, la bruja, mientras se encontraba escondida pudo ver el duelo, Abraham tenía ventaja ante el vampiro, clavó una estaca en su corazón, aquel rey de las tinieblas estaba en el suelo muriendo lentamente.
Sin dudar, el cazador decidió poner a prueba su as bajo la manga, tenía tiempo perfeccionando la magia negra, su intención era esclavizar a Drácula, quería que hiciera su trabajo de eliminar a los monstruos, pero no tomó en cuenta la fuerza de su enemigo.
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El último Van Helsing
FantasiBerhot es el último hombre de la familia tan conocida por cazar monstruos, desde su niñez fue entrenado y educado para combatir contra ellos, lamentablemente los Van Helsing fueron cayendo por una maldición. El es el único que puede ayudar a su herm...