¿Quién no odia las mañanas?.
Bueno la respuesta es Harry Styles, ¿la razón?, un lindo chico de ojos azules que trabaja en Starbucks y le da su café cada mañana a Harry.
Tal vez se pregunten por que Harry no trata de salir con este chico, y la respuesta es bastante simple, Harry es sordo y no sabe como reaccionará el chico cuando se entere. Harry sólo se atreve a decir dos palabras Hola y Gracias, ya que no sabe el sonido de su voz y no sabe si pronuncia bien esas palabras. Pero Harry sabe leer labios, bastante bien, así que sabe toda palabra que Louis le dice y sabe que un día Louis le dijo que le parecía tierno.
- Hola-
- Hey, ¿que ordenarás hoy?- Harry le enseña lo que quiere en su teléfono con la página de Starbucks abierta- Entonces será un frapuchinno chip- Harry asiente- Serían 3. 52- Harry asiente y le da al chico un billete de cinco dólares- ¿Algún día me dirás tu nombre?-
Harry hace una mueca, Louis asiente y se retira a hacer la bebida, al terminar escribe en el vaso un Hola, como lo hacía cada día. Le entregó el vaso al hombre de ojos verdes y lo vio salir por la puerta. Llevaba viendo a ese hombre desde hace casi dos años y aún no sabía su nombre. Y Louis pensaba que la ventaja de trabajar en ese lugar era saber los nombres de chicos lindos.
Lo único que sabía del chico Hola era que trabajaba en las oficinas de enfrente, venía por un café frío cada mañana, salía a almorzar con otros dos hombres de vez en cuando ó venía a comprar un sándwich ó una mierda de esas que todos comían. Pero no crean que Louis lo tiene vigilado, por que no.
Sólo sabe lo que hace cada día de ocho de la mañana a cinco de la tarde.
- ¿Te dijo su nombre?- Zayn hacia un mocha mediano.
- No, tal vez está casado y yo soy muy obvio-
- ¿Qué tal si lo atiendo a la próxima?, ya sabes, para forzarlo a decirme su nombre-
- Sólo dale su café al de traje-
Harry llegó a su oficina, que curiosamente tenía un gran ventanal a la calle y podía ver de vez en cuando al chico de ojos azules cuando tenía un descanso y salía a fumar.
- Harr..- se golpeó con un lápiz tratando de pronunciar su nombre- Hazz- eso salió de su boca fácilmente, lo volvió a repetir- Hazz, ¿Hazz?, ¡Hazz!, Hazz- le gustó. Niall entró a su oficina. Niall sabía (después de trabajar cuatro años con Harry) lenguaje de señas, pero obviamente aún hablaba mientras hacía las señas.
- Tienes una reunión a las dos- Harry asintió- Así que iré por tu almuerzo, por que siempre tardas en eso-
No es mi culpa que la gente no sepa lenguaje de señas. Respondió Harry.
- Tranquilo, ¿algo en especial, ó puedo ir por algo de Starbucks?-
Lo que sea.
- Bien, a las dos Haroldo-
Harry asintió y empezó con su trabajo, sería fácil que Louis supiera su nombre pagando con tarjeta alguna vez, o enseñándole en el teléfono.
A las dos y cuarto entró un hombre de los que salían de la oficina con el chico de ojos verdes, pero el chico de ojos verdes no había salido a almorzar aún. Eso era bastante extraño, siempre salía a almorzar.
- Buenas tardes bienvenido a Starbucks, ¿que va ordenar?-
- Hola, me podrías dar un iced shaken lemon tea, un café helado y dos de esos cosos con queso- Louis rió sabiendo a lo que el rubio se referia.
- ¿Algo más?-
- Sería todo, al té ponle Harry y al café Niall, ambos grandes- pagó con tarjeta.